Al menos 404 palestinos han fallecido y 562 han resultado heridos este martes tras la reanudación de los bombardeos de Israel sobre la Franja de Gaza, según informó Zaher al Waheidi, director de la unidad del Ministerio de Sanidad gazatí encargada del recuento de víctimas.

Las cifras incluyen únicamente a quienes han llegado a los hospitales, mientras que muchas otras personas permanecen bajo los escombros o aún no han sido atendidas por los servicios de emergencia. Los intensos ataques se produjeron tras el fin del alto el fuego, lo que ha generado un nuevo escenario de crisis humanitaria.

"Las instalaciones médicas están literalmente abrumadas a lo largo de Gaza", afirmó Tommasso Della Longa, portavoz de la Federación Internacional de la Cruz Roja, en una sesión informativa en Ginebra

Israel justifica la ofensiva

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, declaró que las fuerzas armadas atacan "objetivos de la organización terrorista Hamás en toda la Franja de Gaza para lograr los objetivos de la guerra". En un comunicado, su oficina destacó que el "plan operativo" para retomar la ofensiva fue presentado el pasado fin de semana y aprobado por la cúpula política israelí.

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El ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Gideon Saar, aseguró que la reanudación de los bombardeos busca destrabar las negociaciones con Hamás, que se encontraban en un punto muerto. "Si hubiéramos seguido esperando, la situación habría permanecido inmóvil", afirmó Saar en un evento en el sur de Israel.

Crisis sanitaria y humanitaria

Ante la creciente cantidad de víctimas, el Ministerio de Sanidad gazatí hizo un llamado urgente a la población para donar sangre, ya que las reservas están agotadas. La situación es crítica, especialmente después de que Israel mantuviera un bloqueo total del acceso de ayuda humanitaria durante más de dos semanas, como parte de su estrategia para presionar a Hamás a extender la tregua inicial.

Diversas organizaciones internacionales han alertado sobre la situación en el enclave. La ONU denunció que algunos de los ataques han alcanzado edificios residenciales, escuelas y campos de refugiados. "Estamos viendo nuevamente cuerpos mutilados de niños envueltos en sudarios", expresó Ajith Sunghay, representante de la Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas en los Territorios Palestinos.

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Por su parte, Hamás acusó a Estados Unidos de complicidad en la ofensiva israelí, luego de que el gobierno estadounidense confirmara que fue informado previamente sobre la reanudación de los ataques. "Esta admisión revela la colusión y parcialidad de Estados Unidos con la ocupación israelí", sostuvo el grupo en un comunicado.

Protestas en Israel por la situación de los rehenes

Mientras continúan los ataques, el Foro de las Familias de Rehenes y Desaparecidos criticó la campaña de bombardeos al considerarla "una completa decepción". Según el colectivo, el Gobierno israelí ha abandonado a los 59 rehenes que permanecen en Gaza desde el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023.

En Tel Aviv, manifestantes han instalado una acampada frente a la sede del Ejército y del Ministerio de Defensa para exigir avances en la negociación para la liberación de los cautivos. Paralelamente, organizaciones civiles y militares han convocado protestas contra la decisión de Netanyahu de destituir al director del servicio de inteligencia interior (Shin Bet), Ronen Bar, lo que ha generado críticas por parte de la oposición y de la fiscal general del Estado.

Expansión de los asentamientos en territorios ocupados

La ONU denunció que Israel ha acelerado sus planes de construcción de viviendas para colonos en Jerusalén Este y Cisjordania, al mismo tiempo que continúa con la demolición de hogares palestinos en esas zonas. Según un informe de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, el traslado de población israelí a los territorios palestinos ocupados constituye un crimen de guerra.

El conflicto sigue escalando mientras la comunidad internacional observa con preocupación el deterioro de la situación humanitaria y la falta de avances en las negociaciones de paz.

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