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¡Verónica Songor ya descansa en su tierra!

Los restos de Verónica Songor fueron sepultados ayer en el cementerio de Loja. Con ese apelativo era conocida la agente que volvió a su ciudad natal en ataúd. Como “la mejor de todas las policías”, la recuerdan familiares y amigos.

Verónica Mireya Songor Tapia fue velada en el casino de oficiales del Comando de Policía de Loja.
Verónica Mireya Songor Tapia fue velada en el casino de oficiales del Comando de Policía de Loja.Freddy Inga

Los restos de la policía Verónica Mireya Songor Tapia ya descansan en su natal Loja. La uniformada de 24 años, quien fue baleada el pasado 9 de octubre en una Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de Socio Vivienda 1, en el noroeste de Guayaquil, fue sepultada a las 16:00 de ayer en el cementerio general Parque de Los Recuerdos, ubicado al sur de la ciudad.

El cadáver de Verito, o Fibrita como la llamaban sus familiares y amigos, arribó a la capital lojana a las 21:00 del lunes. Sus padres, Juan Songor y Piedad Tapia, quienes llegaron al Puerto Principal horas después del ataque con fusil en el que su hija llevó la peor parte, viajaron en otro carro siguiendo de cerca el féretro que contenía los restos de la tercera de sus cuatro descendientes.

A su llegada a Loja, los progenitores fueron recibidos por su familia y amigos, quienes con un abrazo les demostraron sus condolencias por el deceso de su hija.

Verónica Mireya Songor Tapia ya descansan en su natal Loja.
Verónica Mireya Songor Tapia ya descansan en su natal Loja.Cortesía

El ataúd fue retirado de la furgoneta por personal del Grupo de Operaciones Especiales (GOE), cargado en hombros por cuatro uniformados y llevado hasta el casino de oficiales del Comando de la Policía de Loja, donde fue velado hasta antes de ser llevado al camposanto para recibir sepultura.

Verónica Tapia, prima de la fallecida, dijo que la ‘bodycita’ siempre quiso formar parte de la Policía Nacional y que la última vez que se vieron fue en el funeral de uno de sus abuelos, donde se dieron un abrazo.

Gisella Matalio, compañera de colegio y una de las mejores amigas de Songor, manifestó que siempre guardó la esperanza de que Verito se recuperara. “Este ha sido un duro golpe. Ella murió cumpliendo su sueño, ser policía, la mejor de todas las policías”, sostuvo.

(AEB/FI)