Buena Vida
Circo de Rusia, una familia que desafía la altura
Los acróbatas llegaron a la capital el lunes pasado y presentarán un espectáculo a 15 metros.
Cuarenta artistas desafían la gravedad en el circo ruso.
Konstantin y Egeny Ustiyantseva emprendieron un viaje desde Rusia hace un mes y medio. Ambos son artistas de circo y practican las rutinas junto a sus tres hijos, de 12, 2 y 1 año. Su sueño es que los niños sigan sus pasos y se conviertan en acróbatas.
El padre es el payaso principal en la carpa rusa que, desde la noche de este 15 de septiembre, inicia sus funciones en Quito. La madre realiza un show en el aire.
Ellos saben cómo es la vida de los ‘cirqueros’: un día aquí y otro allá, pero se han acostumbrado a los traslados. Ahora con los niños recorren los países acompañados de un coche rojo y un monopatín, para entretenerlos.
38 artistas más vienen con ellos. Son especialistas en la cuerda floja, saltos, bicicleta y actos aéreos. Es la cuarta vez que el Circo Ruso llega a la Capital. Sin embargo, es la primera ocasión en que traen una carpa tan alta, mide 15 metros. Ahí se presentará un show que desafía la gravedad.
Aleksandra Krikunova también forma parte del espectáculo. Aunque no viene de una familia de artistas circenses, su pasión por la danza la llevó a debutar en la carpa. Ahora recorre el mundo montando las coreografías y desfilando con sus pasos de baile.
Pese a los 2800 metros de altura de Quito, los 40 talentos se acoplaron al escenario quiteño. Llegaron el pasado lunes 12 de septiembre. La gira culminará el próximo 9 de octubre. A la par de este elenco, otros 40 artistas llegarán a Guayaquil para las fiestas con el mismo espectáculo.