Adelgaza limpiando

Las tareas del hogar son una gran alternativa para ejercitar el cuerpo cuando no se puede ir al gimnasio.

Simples modificaciones en la rutina diaria son suficientes para quemar calorías. Y las tareas del hogar son una opción perfecta. Quitar el polvo de los muebles, limpiar el baño o lavar ropa son maneras eficaces para sudar.

La fitness coach Diana Pin dice que se queman un promedio de 602 calorías haciendo dos horas de quehaceres hogareños intensos, casi doblando las 374 calorías que se elimina durante una carrera de 5 kilómetros. ¡Pon atención a la siguiente rutina!

Pasos

1) Pon música y comienza a bailar mientras limpias. Elige tus canciones favoritas.

2) Limpia las ventanas en forma vigorosa y alternando los brazos. Los movimientos de extensión para alcanzar las zonas más alejadas harán que tu torso y tus brazos ganen forma.

3) Al momento de aspirar las alfombras, hazlo más rápido. Realiza los movimientos de ida y vuelta en forma rápida y efectúa cierta presión sobre la alfombra. Intenta mantener tu espalda tan recta como te sea posible. No te inclines sobre el aparato.

4) Mueve los grandes muebles y limpia debajo de ellos. Mientras más veces corras tu sofá, más tonificados estarán tus brazos.

5) Para cambiar las sábanas de las camas flexiona las rodillas. Sepáralas si están pegadas a la pared, no te tires sobre el colchón.

6) Usa las compras para hacer entrenamiento con pesas. Realiza extensiones de tríceps detrás de la cabeza con la jarra de leche. Antes de guardar en la alacena tus vegetales enlatados, realiza entre 8 – 10 repeticiones de bíceps con cada brazo.

Otras alternativas

Incluye estos trucos en tu vida diaria y sorpréndete con el resultado.

- Camina. En lugar de tomar un taxi o el colectivo.

- Bebe dos vasos de agua antes de comer. Al saciar parcialmente el apetito con este hábito, no solo se evitan calorías, sino que además se ayuda a prevenir atracones y a aumentar el metabolismo.

- Prescinde del ascensor. Implica un trabajo aeróbico que ayuda a quemar calorías.

- Siéntate con la espalda recta. Este simple hábito, como el primero, puede reducir el cortisol del cuerpo, la hormona vinculada al aumento de peso, especialmente la grasa del vientre.

La experta dice:

“Aprovecha ese tiempo que le das a las tareas del hogar para obtener una casa y un cuerpo reluciente. Ponte ropa cómoda que te permita mover sin dificultad. Aunque te cueste no dejes que te ayuden con las compras del supermercado. Estoy segura que darás tu máximo esfuerzo que terminarás agotada y con unas 400 a 500 calorías menos, complementa esta rutina con una alimentación más saludable y déjate sorprender con los resultados”.

Diana Pin, entrenadora física.