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Diario Extra Ecuador

Pintar el pelo de la mascota: ¿Crueldad o moda?

La tendencia invade las redes sociales, sobre todo por la película ‘Barbie’. Pero qué tan peligroso es hacerlo

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Las tendencias copan a diario las redes sociales. En los últimos días, la película ‘Barbie’ ha acaparado la atención mundial. Accesorios, artículos y prendas de vestir color rosa o fucsia se han adueñado de calles, sitios de diversión, pasarelas y especialmente los cines.

Todos quieren llevar algo de la famosa y glamurosa muñeca, incluso hay quienes se han atrevido a pintar el pelaje de su mascota, específicamente de los perros, con los colores que la identifican.

Pero aunque para muchos pueda resultar gracioso, la realidad es que si el pelaje de ese perro o cualquier otro animal ha sido tinturado con productos de uso humano, estos pueden causarle irritación severa, alopecia, quemaduras, alergias e incluso intoxicación si los llegase a ingerir.

“Los tintes para humanos no deben usarse en mascotas, ya que al ser lamidos por el perro le pueden producir problemas hepáticos, digestivos y renales”, asegura el veterinario Diego Salinas.

Productos aprobados

Salinas indica que es seguro teñir el pelaje del perro siempre y cuando se utilicen tinturas o productos exclusivos para mascotas. “Se lo debe hacer con productos orgánicos de cosmética animal. Con tres o cuatro baños sale la tintura. No son tóxicos. Los dueños deben llevar al perro a un centro especializado. Hacerlo en la casa es irresponsable”, aconseja el especialista.

Desde una perspectiva ética, la Dra. Anna Foreman, veterinaria interna de Everpaw Pet Insurance, declaró al diario The Sun que personalmente está en contra de esta práctica porque solo beneficia egoístamente al dueño. Incluso se llega a cosificar a la mascota, yendo de la moda a la crueldad.

No son juguetes

Peta, organización en favor de los animales, explica en su portal que no se debe pintar a los perros porque, al igual que los gatos, no son objetos ni juguetes, sino seres vivos que merecen cuidado y respeto.

Añade que “ningún animal tiene un deseo natural ni necesidad de ser teñido, perforado, tatuado, mutilado o alterado de cualquier manera para satisfacer las preferencias estéticas humanas”. Así el tinte sea seguro para las mascotas, se debe tener precaución para mantenerlo lejos de los ojos y la boca del animal. Y es prioritario realizar pruebas de alergia.

Modifican el olor

El pelo del perro es parte importante de su salud y estilo de vida. Por eso, uno de los principales problemas del tinte es que modifica seriamente el olor natural del can, algo que nosotros no podemos percibir. Esto resulta molesto para el propio animal, a quien le incomoda el olor que desprende y puede llegar incluso a autolesionarse intentando eliminar el tinte de su cuerpo. Tinturar a un perro también perjudica su capacidad de comunicarse con sus congéneres, pues debemos tener en cuenta que los perros se saludan olfateándose unos a otros. El olor artificial que desprende un perro con tinte puede hacer que otros canes lo rechacen o, lo que es aún peor, que intenten agredirlo.

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