Mujeres, ¡Pilas con los tumores de ovarios!

En ginecología, existen tumores benignos y malignos y dependiendo de estos es la frecuencia en edad que se presentan, explica la doctora Mélida Flor Emén, líder de ginecología del hospital Abel Gilbert Pontón.

En el caso de los tumores de ovarios, explica la médico, no existen factores predisponentes para que se desarrolle alguno.

“No existe un patrón específico. Las pacientes pueden desarrollar tumoraciones en el ovario sin necesidad de tener ningún tipo de antecedente especial. No es una patología que tiene una predisposición marcada”, dice la doctora.

Esto coincide con el criterio del ginecólogo Galo Valarezo, quien dice que una mujer que desarrolla un tumor de ovario es raro porque no depende de alguna enfermedad previa o alguna condición. “Es como una lotería. Son células que empiezan a crecer”.

Los tumores de ovarios más frecuentes son el cistoadenoma, que es tumor benigno y el cistoadenoma carcinoma, que es el tumor maligno, enfatiza Flor.

“Estos tumores son un poquito más frecuente en la tercera década; y empiezan a desarrollarse y su crecimiento es un poco más rápido que los quistes normales, en una edad a partir de los 45 años”, dice Valarezo.

El tratamiento para este tipo de patología es la cirugía; sin embargo se requiere de varios tipos de exámenes para determinar cuál es la intervención más idónea.

Podría ser drenado con incisiones pequeñas, cuando el tumor es pequeño. Con tumoraciones más grandes, explica Valarezo, cabe hacer una laparotomía (cirugía abierta) para evitar que se disemine (riegue) el contenido del mismo y evitar el riegos. “Porque puede tratarse de un tumor maligno y si se disemina en el organismo, lo contagio”, agrega el médico.

Los especialistas sugieren mantener una vida activa físicamente y mantener los chequeos mínimos cada año, que deben incluir: ecografías, exámenes de mamas, y el papanicolao.