El centenario de Barcelona SC, lejos de convertirse en un año histórico de éxitos deportivos e institucionales, ha terminado por desnudar las posibles fallas estructurales que arrastra el Ídolo del Astillero.

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Exdirectivos del club apuntan al presidente, Antonio Álvarez, como el responsable del fracaso del equipo, marcado por la eliminación temprana de todos los torneos Conmebol y un pobre rendimiento general.

Exdirectivos apuntan a Antonio Álvarez por la crisis de Barcelona SC

Las voces críticas se alzan desde diferentes frentes. El abogado Gerson Haro, exmiembro de la comisión jurídica durante el periodo de José Francisco Cevallos (2015-2019) y de la comisión normativa en la era de Carlos Alfaro Moreno (2019-2023), calificó la gestión actual como una improvisación absoluta. “No hay planificación deportiva ni administrativa, todo se hace a la maldita sea”.

Para el exdirigente, los problemas del club son estructurales y vienen desde la dirigencia. “El problema deportivo es estructural, viene desde la cabeza. Si quieres un buen proyecto, necesitas planificación a corto y largo plazo. Eso no existe en Barcelona. A los socios no se nos ha presentado nada”.

Gerson Haro denuncia improvisación

Según el abogado, incluso eventos como la fiesta del centenario (que se realizó el pasado 30 de abril de 2025) reflejaron el caos interno de la institución. “¿Cómo es posible que anuncien unos artistas y luego cambien horas antes del evento?”.

Haro aseguró que ya en el tercer año de la presidencia de Cevallos propuso una planificación deportiva formal, pero fue rechazada, lo que motivó su renuncia.

Y aunque en la administración de Carlos Alfaro Moreno trabajó en una propuesta de reforma estatutaria para blindar al club de malos manejos, dicha iniciativa es ignorada por la actual directiva.

Posible conflicto de intereses: vínculos entre el club y el representante José Chamorro

La falta de un plan estratégico es evidente en el Ídolo, aseguró un exdirectivo que pidió mantener su anonimato. “Es un fracaso terrible. En un solo año subieron 7 millones de dólares al pasivo (es de unos $55 millones). Y si no fuera por la venta de Allen Obando (por 2,6 millones de dólares), el golpe sería mayor”.

Este exdirigente también advirtió sobre un posible conflicto de intereses con el representante de jugadores José Chamorro, director ejecutivo de Imagesport SA, quien tiene 11 futbolistas en el actual plantel.

“Se armó un equipo débil, lleno de representados por Chamorro. El hijo de Alfaro Moreno (actual director deportivo del club), Gonzalo, trabaja con él. Y hasta Segundo Castillo, quien fue su scouting (buscador de jugadores), ahora es el técnico del club. Esto va más allá del manejo deportivo, hay intereses cruzados”, aseveró.

Falta de transparencia institucional: informes financieros sin tiempo para revisión

En el plano institucional, las fallas también serían alarmantes. Una fuente cercana a la Comisión de Control y Transparencia reveló que los socios reciben los informes financieros y de planificación apenas uno o dos días antes de las asambleas, sin tiempo suficiente para analizarlos.

“Durante la época de Cevallos o Alfaro Moreno, al menos los informes llegaban con anticipación. Hoy no hay acceso oportuno a la información. Todo es improvisado”, declaró.

Además, se señaló que la planificación para la temporada 2025 fue solicitada en múltiples ocasiones por la comisión, sin respuesta. La información fue entregada de manera incompleta a finales de marzo, y solo se completó el 1 de mayo de 2025, cuando se acercaba la asamblea de socios del club.

“Eso demuestra la falta de planificación, y esa improvisación nos ha llevado a aumentar el pasivo y depender de jugadores que no rinden, muchos de ellos vinculados a Imagesport, empresa a la que el club le debe casi tres millones de dólares”, denunció.

El diagnóstico que hacen estos exdirectivos y la fuente cercana al club apunta a que Barcelona fracasó en su centenario no solo por malos resultados deportivos, sino por una gestión deficiente, improvisada y carente de visión, indicaron.

Las promesas incumplidas de Álvarez: entre discursos y realidades

Las promesas de un equipo competitivo y de grandeza institucional por parte de Álvarez quedaron en discursos de campaña. “Buscaremos ser fuerte, peleando copas no solo en lo nacional, sino en también en lo internacional. Necesitamos una Copa Libertadores y la pelearemos”, prometió Álvarez en su presentación como presidente del club, en diciembre de 2023.

Y, en enero de 2024, dijo: “Tendremos refuerzos de jerarquía... los que lleguen serán nombres importantes no cualquier chimichurri...”.

EXTRA se comunicó con el departamento de prensa de Barcelona y solicitó una entrevista con el presidente Antonio Álvarez, para conocer cuál es la planificación deportiva del club en su año de centenario, pero hasta el cierre de la edición impresa (las 16:00 del miércoles 28 de mayo de 2025), no hubo respuesta.

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