Pablo Ansaldo Villacís sigue jugando el partido más difícil de su vida. El histórico arquero de Barcelona, Manta y la selección nacional ingresó el 2 de septiembre a una casa asistencial por un quebranto en su salud y hoy sus allegados dejan todo en las manos de Dios. Sigue en terapia intensiva y los médicos luchan por recuperarlo del derrame cerebral que mantiene en cama al exgolero de 81 años que llegó a Barcelona en 1954, donde logró tres títulos, dos de ellos como jugador y uno como jugador-entrenador.

En su época de golero nunca utilizó guantes para atajar y fue campeón con los amarillos en 1960, 1963 como jugador y en 1966 llevó al cuadro amarillo al título como jugador y DT, tras el alejamiento del uruguayo José María Rodríguez. Aquí tuvo como referentes a la famosa “Cortina de Hierro” conformada por Alfonso Quijano, Vicente Lecaro, Luciano Macías y Miguel Bustamante.

Fue el primer DT nacional en dirigir en el fútbol del exterior. Ansaldo condujo a los equipos colombianos Atlético de Bucaramanga y Once Caldas, en 1970.

Jugó con ‘Wacho’ Muñoz, Enrique ‘Pajarito’ Cantos, José Vicente Balseca y otros jugadores que hipnotizaban la pelota.

Ansaldo se retiró de Barcelona en 1966 por un problema pulmonar y la fuerte lesión que sufrió en las costillas, al ser golpeado por un jugador chileno, cuando Ecuador se jugaba la clasificación al Mundial de Inglaterra.

Fue el primer guardamenta en atajar un penal en campeonatos ecuatorianos oficiales en 1960 y se retiró en 1967 jugando y dirigiendo en el Club Sport Manta. Jugó con la Selección de fútbol de Ecuador en 23 ocasiones.

Exjugadores como Luis ‘Chino’ Gómez, Claudio Alcívar, entre otros, se sumaron a la campaña que inició Barcelona por redes sociales para conseguir pintas de sangre que necesitaba el Ídolo del Ídolo. “Gracias a Dios las personas respondieron al llamado y se consiguió la sangre que necesitábamos, sólo hay que esperar a que se recupere” señaló su hija Anyel Ansaldo.

El ‘gato’ como lo conocían a Ansaldo en el fútbol, recibió un homenaje por parte de Barcelona le pasado 4 de julio, antes del juego con Universidad Católica en el estadio Monumental, donde además estuvo el brasileño Manga que también fue homenajeado.