La noche del miércoles 24 de septiembre de 2025 quedará grabada en la historia de Independiente del Valle. En el estadio Palogrande de Manizales, los Rayados vivieron una verdadera epopeya, remontando un marcador adverso y ganando por primera vez en Colombia para clasificar a las semifinales de la Copa Sudamericana.

El partido comenzó con un aire de tensión, pues Once Caldas llegaba con la ventaja de 2-0 obtenida en Ecuador. Sin embargo, Independiente no tardó en mostrar su intención de revertir la serie.

El minuto 27 marcó el inicio de la fiesta negriazul. Junior Sornoza, con la magia que lo caracteriza, se abrió camino entre la defensa colombiana y sirvió un centro perfecto que encontró la cabeza de Michael Hoyos.

Una noche de gloria de Independiente del Valle

Era el 1-0, un gol que encendió la esperanza y mantuvo a Independiente con vida en el primer tiempo. Los 45 minutos iniciales demostraron la superioridad del equipo ecuatoriano, que incluso mereció ampliar la ventaja antes del descanso.

El segundo tiempo comenzó con la misma intensidad. Spinelli generó varias amenazas sobre la portería de Aguirre, quien se convirtió en un muro.

Sin embargo, a los 50 minutos, la fórmula se repitió: tiro de esquina, Junior Sornoza midiendo al milímetro, y Hoyos nuevamente elevándose para marcar de cabeza. Con el 2-0, la serie se igualaba 2-2 y los jugadores de Once Caldas no podían creerlo; el sueño de Independiente se acercaba.

Ahora a jugar con Atlético Mineiro

Los penales fueron el epílogo de esta historia épica. La tensión se podía cortar con un cuchillo. Dayron Moreno abrió la tanda para los colombianos, pero Juan Cazares respondió de inmediato. 

La incertidumbre creció con fallos y aciertos de ambos lados, hasta que el golero James Aguirre erró su disparo y Loor selló el 5-4 final. Independiente del Valle avanzaba a semifinales, donde enfrentará a Atlético Mineiro, celebrando así una noche histórica que quedará en la memoria de sus hinchas para siempre.

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