Las elecciones de Barcelona se han convertido en toda una novela dramática. Primero, Carlos Alfaro Moreno, quien el 24 de octubre presentó su candidatura a la reelección presidencial del Ídolo, tuvo que declinar, dos días después, su postulación, debido a un impedimento que existe en la Ley del Deporte, la cual establece que los directivos de organizaciones deportivas pueden optar por la reelección inmediata por una sola vez.

De acuerdo al artículo 151 de dicha Ley, el actual presidente canario no podía volver a participar en los comicios toreros, ya que del 2015 al 2019 fue vicepresidente de la directiva que encabezó José Francisco Cevallos y desde el 2019 hasta el 2023 cumple funcione como presidente amarillo.

Es por ello que el también exdelantero decidió dar un paso al costado y le cedió su puesto a Antonio Álvarez, quien iba a ser su vicepresidente, pero que tras dicha renuncia correrá como candidato a la presidencia de Barcelona.

En cuanto al otro candidato, Rafael Verduga, el Tribunal Electoral del Ídolo determinó que tampoco podría participar en las elecciones del 1 de noviembre del 2023, ya que el empresario también estuvo en la directiva de Cevallos (fue vocal) y en la de Alfaro Moreno (fue vicepresidente).

Pese a esto, Verduga apeló ante el Tribunal Electoral canario, pero la Procuraduría General del Estado emitió un informe en el que explicó que su candidatura incumple el artículo 151 de la Ley del Deporte, que establece que los directivos deportivos pueden ser reelectos una sola vez.

El abogado Geovanny Cárdenas le explicó a EXTRA que la lectura que hizo la Procuraduría "es exacta", ya que explica muy bien el por qué ninguno de los dos candidatos podría participar en estas elecciones.

"Aquí se aplica el principio de jerarquía normativa, tal como lo ha resuelto la Procuraduría General del Estado... Ambos candidatos ya han estado en dos dirigencias anteriores de forma consecutiva y en la Ley se especifica que no puede haber una tercera reelección, así hayan estado en dignidades diferentes. Ellos deberán esperar un periodo (cuatro años), para volver a postularse", explicó Cárdenas.

¿Qué pasará con la candidatura de Verduga?

De acuerdo a los estatutos de Barcelona, si la impugnación de Rafael Verduga no pasaba, su lista sería eliminada automáticamente.

En caso de darse este escenario, la única lista que quedaría en pie sería la de Antonio Álvarez y José Luis Nogales (vicepresidente).

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