Botafogo llegaba como el rival más duro de la Copa Libertadores. El actual campeón del torneo, el mismo que había derrotado al PSG (dueño de la última Champions) en el Mundial de Clubes. En otras palabras: era el todopoderoso. Pero en Quito, en el Rodrigo Paz, Liga de Quito lo redujo a nada. Los albos ganaron 2-0 con goles de Gabriel Villamil y penal de Lisandro Alzugaray y sellaron su pase a cuartos de final.

Altura, fútbol, coraje… una mezcla de todo. Lo cierto es que LDU ya está en la siguiente fase, en la que se medirá a Sao Paulo, un rival brasileño con un viejo conocido del balompié ecuatoriano: Juan Ignacio Dinneno, quien militó en Deportivo Cuenca y en Barcelona SC.

Diario EXTRA conversó con dos brasileños que conocen muy bien el fútbol tricolor, porque lo jugaron y lo sufrieron: Toninho Vieira y Marcos ‘Magú’ Rodrigues.

“EN BRASIL YA NO ASOMBRA”

Toninho exjugador del Ídolo del Astillero, lo dijo sin rodeos: “Lo de Liga de Quito ya no causa asombro en Brasil. El partido contra Botafogo se jugó como equipo de casa. Claro que la altura influye, sí, pero a veces los visitantes se meten más de cabeza en eso que en el propio fútbol. Liga hizo lo suyo, simple”.

EL ESTADO ANÍMICO

Magú, recordado en Católica y Barcelona, fue más frontal: “Botafogo era el favorito, el campeón, con una plantilla enorme y una de las más caras de América. Pero en la cancha no gana el dinero, gana el estado de ánimo, estar bien física y mentalmente. Y en Quito había que hacer la diferencia, pero Botafogo no lo hizo”.

El exfutbolista fue más allá y resaltó la evolución del balompié nacional: “El fútbol ecuatoriano es el que más ha crecido en Sudamérica desde el título de LDU en 2008. Eso se ve ahora. Sao Paulo no sabe lo que le espera en Quito: no solo la altura, también un equipo con juego. Esta Liga está en silencio, pero ya está en cuartos”.

Así llegan Liga de Quito y Sao Paulo

Y sobre el próximo rival, advirtió: “Sao Paulo está jugando tres torneos: Brasileirao, Copa do Brasil y Libertadores. Prácticamente un partido cada tres días. Liga es muy fuerte de local. Dependerá de cómo lean el partido, de cómo frenen ese medio campo albo, que es su arma más peligrosa. Además, tener a un entrenador brasileño como Tiago Nunes es un plus”.

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