Siete noches de angustia: la liberación que devolvió la esperanza a tres familias latacungueñas

La noche del 13 de diciembre de 2025 marcó un antes y un después para tres familias latacungueñas. Eran cerca de las 23:00 cuando dos menores de edad y un adulto se movilizaban por el sur de Latacunga, cerca de un gimnasio, sin imaginar que su rutina cotidiana sería interrumpida de forma violenta. Dos vehículos los interceptaron. De una camioneta y un automóvil descendieron seis hombres armados que, en cuestión de segundos, los sometieron y se los llevaron con rumbo desconocido. Todo quedó registrado en una cámara de seguridad.

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Minutos después del secuestro, los teléfonos de sus familiares comenzaron a sonar. A través de mensajes de WhatsApp, los captores confirmaron lo impensable: los jóvenes estaban secuestrados. La exigencia fue clara y cruel: 150.000 dólares por su liberación. Desde ese momento, la incertidumbre, el miedo y la desesperación se instalaron en los hogares afectados.

Agentes de la Dinased y Unase actuaron

La denuncia fue inmediata y activó el trabajo de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Extorsión y Secuestros (DINASED), junto con la Unidad Nacional Antisecuestros (UNASE). Según explicó el coronel Armando Padilla, comandante de la Subzona 5 Cotopaxi, desde la madrugada del 14 de diciembre se desplegó una investigación técnica y profesional, basada en inteligencia, seguimiento y operaciones coordinadas.

Durante siete días, los equipos especializados ejecutaron acciones simultáneas en Latacunga, Riobamba y Ambato. El operativo decisivo se concretó la mañana del sábado 20 de diciembre, cuando los tres jóvenes fueron liberados juntos en un domicilio ubicado en el sur de Ambato. Horas más tarde, ya en libertad, se reencontraron con sus familias en medio de abrazos, lágrimas y alivio.

El coronel Padilla confirmó que las víctimas fueron valoradas médicamente y se encuentran en buen estado de salud. Además, destacó que la liberación se logró sin que se pagara “ni un solo centavo” del rescate exigido. En el operativo se recuperó el vehículo en el que se movilizaban las víctimas y se aprehendió en flagrancia a dos ciudadanos ecuatorianos, uno de ellos con un amplio historial delictivo que incluye extorsión, tenencia de armas y terrorismo.

Por su parte, el gobernador de Cotopaxi, Nelson Sánchez, resaltó el trabajo articulado entre la Policía Nacional y las autoridades del Ejecutivo. Explicó que el manejo reservado de la información fue clave para salvaguardar la vida de los secuestrados y subrayó que este caso demuestra que, cuando se cumplen los protocolos y existe confianza en las instituciones, los resultados llegan.