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Jasú Montero se corrige las 'chichis' ¡Ahora sí, saque Pechito!

La cantante y presentadora está feliz porque con una nueva intervención se pudo subsanar una mala operación que se le practicó hace años

Jasú Montero
Jasú Montero asegura que vivió en silencio todo el procesoCortesía

La práctica de cirugías inapropiadas en sus senos le pasó factura a Jasú Montero, por lo que el viernes 28 de enero de 2022 debió ser operada de urgencia para corregir ese desatino.

La cantante hoy se recupera en su casa y desde ahí cuenta a EXTRA la desagradable experiencia que empezó a vivir hace algunos años, en lo que ella define como el “error más grande de mi vida”.

Quería reducirlas

“Siempre he tenido unas chichis naturales muy grandes y eso me hacía sentir mal. Mi sueño era tenerlas pequeñas, acorde a mi contextura”, explica la artista y presentadora.

En ese proceso, comenta que hace algún tiempo se sometió a una intervención quirúrgica, pero los resultados no fueron los esperados.

“Dos días después de esa operación se abrieron todos los puntos y estuve así un año. Los pezones se me hicieron llaga y las curaciones me las hacían en carne viva”, añade.

Reconoce que luego de ese primer paso hubo otros procedimientos que no fueron los más correctos.

Accidente doméstico

Hace siete años, luego de convertirse en madre, comenta que planificó entrar al quirófano para corregir las secuelas, pero en diciembre de 2015 tuvo un accidente que lo postergó todo.

“Fue cuando sufrí quemaduras y mi chichi izquierda resultó más afectada, eso retrasó la operación porque había que esperar que la piel sane”.

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Acudir al experto

Luego de su actual operación, Jasú se siente feliz, quiere olvidar lo que sufrió y al médico responsable prefiere no nombrarlo. Eso sí, hace un llamado a las personas que precisen de una intervención, a acudir a profesionales capacitados y así evitar lo que a ella le tocó padecer.

“Ese error de mi pasado lo sufrí en silencio, era muy joven y no me informé bien, por eso deben acudir a especialistas y verificar que realmente lo sean. Han pasado años, pero gracias a Dios y a mi doctora Mónica Espinoza, todo se va solucionando”, finaliza.