La creadora de contenido ecuatoriana Génesis Lalama enfrenta días de polémica luego de que la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) anunciara la clausura de varios locales de comida en Guayaquil. 

La institución realizó operativos sorpresa hace más de una semana y entre los negocios inspeccionados se encontraba supuestamente el de la influencer, conocido por la venta de corvinas.

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La noticia tomó fuerza rápidamente en redes sociales, no solo por el masivo operativo de Arcsa, sino por el tono de la entidad al comunicar los hallazgos. 

En un video publicado en sus canales oficiales, este 5 de noviembre de 2025 Arcsa afirmó que “esta noche de brujas no fueron fantasmas ni diablitos los que causaron miedo en Guayaquil, sino la falta de higiene en algunos restaurantes del suroeste de la ciudad”. Las imágenes mostraban situaciones insalubres detectadas en distintos locales: heces de roedor y cocinas junto a baños. “El riesgo no estaba en comerse una espina”, ironizó el organismo.

En otro establecimiento inspeccionado, las cámaras registraron un ambiente con cucarachas en plena cocina. Arcsa describió el panorama como “insalubridad general y descuido total”.

Lalama se pronunció sobre la clausura

Aunque la entidad no mencionó nombres de los negocios —como lo exige el debido proceso—, usuarios de TikTok y X comenzaron a comparar los videos con fachadas reconocibles. Esas comparaciones terminaron por vincular uno de los establecimientos clausurados con el negocio de Lalama Onofre.

La creadora de contenido no tardó en posicionarse frente al tema. En varias transmisiones en TikTok, apareciendo junto a su esposo, confirmó que su local sí fue clausurado, e incluso dicha acción la consideró "injusta" pero aseguró que algunos de los videos difundidos no pertenecían a su negocio. De acuerdo con su versión, Arcsa habría combinado imágenes de diferentes locales en una sola pieza audiovisual, lo que habría generado confusión entre los usuarios.

“Mezclaron varios videos. Está bien que suban uno, pero no me pareció que mezclaran imágenes de todos los locales. Salen presas de pollo y nosotros no vendemos pollo”, reclamó y aclaró que en el local no existen plagas de ningún tipo. 

Sobre las causas de la clausura, Lalama y su esposo señalaron que no fue por desaseo, sino por incumplimientos específicos: la ubicación del baño, que debe modificarse estructuralmente para cumplir con la normativa, ya que está ubicado dentro de la cocina. 

La influencer decidió hablar del tema y poner fin a las especulaciones en sus redes sociales. También pidió a sus seguidores no dejarse llevar por la desinformación. EXTRA la contactó vía WhatsApp pero hasta el cierre de este reportaje no se obtuvo respuesta. 

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