Que él ya no residía allí, sino que solo acudió a darle “una vuelta” a su residencia. Eso fue lo que supuestamente, según un vecino, había llegado a hacer el policía en servicio pasivo al que asesinaron a pocos metros de una vivienda de su propiedad, en Sauces 5, norte de Guayaquil.

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El cuerpo de William Patricio Estévez Toscano, de 48 años, quedó tendido sobre una acera de esta zona del norte de la urbe, junto a su vehículo, un Hyundai Creta azul, que quedó con los vidrios rotos a causa de uno de los disparos que recibió el expolicía.

Según la versión del coronel Hugo Albán, jefe del distrito Modelo, Estévez Toscano fue acribillado justo después de descender de su carro. Inmediatamente, fue interceptado por dos sujetos a bordo de un Chevrolet Aveo negro, que luego de iniciar su huida terminó estrellado contra una motocicleta y el parterre central de la avenida Antonio Parra Velasco.

La policía, de acuerdo con las declaraciones del jefe distrital, recibió la alerta. Por fortuna, existe un cuartel de motorizados a menos de un kilómetro de distancia de la escena del crimen. “Durante la persecución, (los atacantes) se impactaron con un motociclista. Él se encuentra estable. Se los detuvo y, al revisar el vehículo, se determinó que este había sido reportado como robado el 8 de septiembre y además se halló un arma de fuego de marca Glock calibre 9 milímetros”, detalló.

Sobre los hombres aprehendidos junto con el arma y el auto, el coronel Albán reveló que uno es ecuatoriano, de 21 años, y el otro es extranjero, de 32 años. Sin embargo, no contaban con el registro de antecedentes penales hasta el cierre de esta edición.

La familia del expolicía Estevez estaba desconsolada

El ataque armado dejó en llanto a sus familiares, quienes entraban y salían de la residencia de tres pisos que, además, tenía un letrero de ‘se alquila’ colgado en su fachada. “Él se había cambiado de casa hace unas semanas. Se fue a vivir a otro sector del norte también”, reveló un pariente.

EXTRA conoció que Estévez Toscano se convirtió en agente de la Policía Nacional en 1998 y se mantuvo en la institución hasta el 2019, cuando pidió el cese de funciones con el rango de sargento primero, luego de haber laborado en la unidad de Criminalística, según documentos en los que se lo citaba. 

Además, constaba como “accionista fundador” de una empresa que prestaba “asesoría legal, peritaje y consultoría”, en un documento de septiembre de 2019.

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