Este martes 21 de octubre de 2025, el expresidente derechista de Colombia, Álvaro Uribe Vélez, fue absuelto en segunda instancia tras haber sido condenado a 12 años de cárcel por fraude procesal y soborno de testigos en un juicio extenso que lo llevó, incluso, a pasar varios días en prisión domiciliaria.

La decisión fue tomada por el Tribunal Superior de Bogotá. “La Fiscalía no acreditó una vía alternativa lícita que condujera a la prueba, por lo que la doctrina de descubrimiento inevitable y hallazgo a plena vista resultan inaplicables. Se excluirán las grabaciones”, señaló el magistrado a cargo de la revisión de la condena en primera instancia.

La discusión jurídica giró en torno a la grabación de una llamada telefónica entre el exmandatario y su abogado, Diego Cadena, en la que se habría acordado entregar dádivas a un preso para que hablara en contra del senador y ahora precandidato presidencial, Iván Cepeda.

Mientras que la jueza de primera instancia determinó que dicha grabación era legal y fue la prueba clave para emitir su condena, para el juez de segunda esta conversación fue obtenida de manera ilegal. 

La reacción del Presidente, Gustavo Petro

Tras conocerse esta decisión, que marca la discusión política en plena campaña preelectoral para la presidencia del país vecino, el actual mandatario, Gustavo Petro, se refirió a lo ocurrido.

"El Tribunal Superior de Bogotá repite la historia, contradice a la Corte Suprema de Justicia y afirma que la interceptación que judicialmente hizo un magistrado de la Corte Suprema a un delincuente, en la que aparece la voz de Uribe hablando de sobornos, es intimidad", señaló en su cuenta de X.

Y añadió: "Así se encubre la historia de la gobernanza paramilitar en Colombia, es decir, la historia de los políticos que llegaron al poder aliados con el narcotráfico y que desataron un genocidio en el país”.

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