¡Estamos asqueados!

¡Los ecuatorianos estamos asqueados de la corrupción! Las revelaciones sobre los saqueos perpetrados en el correato ya superan todo lo imaginable. Las cifras son asombrosas. ¡El ‘levante’ fue a lo grande!

Desde que se restableció la democracia con Jaime Roldós Aguilera en 1979, no se había visto la corrupción que se experimentó en el Gobierno anterior de Rafael Correa Delgado. Los verdes pasaron un buen tiempo y se afanaron en aludir a la larga noche neoliberal, al feriado bancario y los banqueros ‘sabidos’, cantaleta que queda chica ante los saqueos cometidos por ellos, los correistas.

El Ecuador tiene un alto porcentaje de jóvenes que no vivieron las dictaduras militares ni del año 1963 ni la del año 1972. Sí alcanzaron la inestabilidad donde se tuvo varios presidentes por corto tiempo. En ninguna de estas épocas se saqueó el país como ahora se lo ha hecho. Si algo se hizo, parecerían niños de pecho comparado con la década ganada.

El alto precio de petróleo, la toma del Fondo para Emergencias, la sustracción de los dineros del IESS y del ISSFA, las oscuras operaciones del Banco Central y el endeudamiento con los chinos hizo que el país nadara en dólares, situación propicia para negociados, coimas, extorsiones, que volvieron ricos a un buen número de ovejunos, algunos fugitivos, otros ahora caminan por la sombra...

Los escándalos, en que están inmersos personajes y donde aún faltan por salir algunos, han rebasado las fronteras, por lo que en el exterior somos calificados como un país corrupto, solo superados por los africanos.

¡Un país asqueado exige limpieza y sanción!