EMPIEZA HOY UNA semana que será muy corta para las labores ordinarias pues, por disposición oficial, habrá un feriado (quizás el más largo de este año) de 4 días, es decir jueves 1, viernes 2, sábado 3 y domingo 4 de noviembre. No entendemos por qué el asueto del jueves 1, Día de Todos los Santos, pero que nunca -que recordemos- ha sido considerado feriado. No así el viernes 2, Día de los Difuntos, en que muchos compatriotas aprovechan para visitar las tumbas de sus progenitores u otros familiares o amigos íntimos ya fallecidos. El sábado 3 también es feriado nacional (aunque este año caerá sábado) por recordarse la independencia de Cuenca, solidarizándose (el año 1820) con la rebeldía de los guayaquileños algunas semanas antes, el Nueve de Octubre. A continuación viene el domingo 4, vísperas del lunes 5 en que recién se iniciarán las actividades del penúltimo mes del año 2018. (Esta vez, todos o casi todos amaneceremos, ese día, con la pereza y el “recorderis” de que todo lunes es feo...

SI BIEN ESTOS “puentes vacacionales” favorecen al turismo interno, pues muchos compatriotas aprovecharán para pasear o para visitar las tumbas de sus familiares en otras zonas, en cambio tenemos que recordar el drama de millares sin un empleo fijo, y que viven prácticamente “al día”, sobre todo los vendedores ambulantes o al pie de los semáforos, y también quienes laboran en “la bahía” o que no tienen un patrono fijo y, por supuesto, no tienen Seguro Social y menos jubilación, etc.