Graves casos de corrupción siguen detectando en el hospital Teodoro Maldonado Carbo, ante lo cual el director del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), al que pertenece dicho centro de salud, se vio en la obligación de aplicar medidas drásticas siendo una de las primeras el disponer la destitución de casi todo el personal jerárquico del hospital.

Hay que consignar y lamentar, además, que un funcionario de la institución haya sido agredido brutalmente porque presentó el informe acusatorio en el presente caso.

Debemos recordar que no es la primera vez que se dan este tipo de denuncias y comprobaciones pues aún está fresca en la memoria del colectivo social el sorprendente descubrimiento de túneles o bodegas subterráneas en las cuales se acumulaba una enorme y costosa cantidad de medicinas, algunas ya caducadas.

También se descubrió que ciertos empleados del hospital se sustraían los fármacos para venderlos en farmacias, en algunas de las cuales eran incluso condueños.

Este problema agrava aún más el caso de la institución aquejada por una grave crisis económica y la escasez de medicinas, sobre todo las que se requieren para combatir las enfermedades catastróficas.