SUSCRIBIRME POR $1/ 1 MES

Exclusivo
Opinión

Editorial: Independencia de Cuenca

Casi tres semanas después de haberse declarado la independencia de Guayaquil del dominio colonial español, los cuencanos lograron independizarse un 3 de noviembre de 1820 incorporándose además a la lucha armada contra las fuerzas realistas. Y poco después, ya organizada la defensa nacional, desde Guayaquil se organizó y financió las tropas que participaron en la gesta libertaria que concluiría dos años después con la Batalla del Pichincha, que independizó a los territorios que el futuro sería la República del Ecuador, en la zona austral de lo que antes fue la Real Audiencia de Quito.

A Cuenca, la tercera ciudad en población, tamaño e importancia del país, luego de la capital de la República y el Puerto Principal, se ha denominado como la Atenas del Ecuador, gracias a su importante trayectoria y tradición en la actividad cultural recordándose nombres ilustres como lo fueron Domingo Crespo Toral, Humberto Vásquez, Remigio Romero y Cordero, Alfonso Moreno Mora, en los primeros cien años del siglo pasado. Luego aparecieron nuevos representantes culturales como lo son César Dávila Andrade, Jacinto Cordero, Efraín Jara Idrovo, Eugenio Moreno Heredia, Alfonso Cuesta, entre otros.

La ciudad de ‘Los cuatro ríos’, como también se la conoce, se ha destacado además por su gran progreso urbanístico y por la importante actividad artesanal e industrial. Merece el saludo y felicitación de todos los ecuatorianos en esta, su importante efemérides.