Opinión
Editorial: Disputas interprovinciales
Si solo fuese de un reordenamiento territorial, el asunto carecería de mayor trascendencia. Pero en los últimos tiempos se trata de cercenar gravemente el territorio guayasense.
El territorio de la República es uno solo, pero para su administración ha sido dividido en provincias, cantones y parroquias. Guayas era una provincia de considerable territorio que fue recortada con la creación de la provincia de Santa Elena y sufre controversias por ese patrimonio en varias ocasiones, la última es la reducción de su territorio en más de 250 kilómetros cuadrados dentro de los cuales hay minas de oro, cascadas turísticas, campos de producción agrícola, y todo se reparte ahora entre varias provincias.
Si solo fuese de un reordenamiento territorial, el asunto carecería de mayor trascendencia. Pero en los últimos tiempos se trata de cercenar gravemente el territorio guayasense, quitándole la posesión sobre importantes bienes que restarían seriamente sus ingresos.
No cabe hacer una defensa que suene a pugna fratricida. Guayas jamás lo ha hecho, a pesar de la sistemática disminución de su territorio. Se trata de que la nueva disposición territorial privaría a la provincia de ingresos importantes, indispensables para el cumplimiento de sus fines y propósitos como parte de la unidad provincial.