Lo que no pudieron conseguir en la cancha, lo buscan en la mesa. La selección de fútbol de Chile pasa por una etapa más cercana a la humillación que a la gloria. El reclamo levantado ante la FIFA porque supuestamente el volante Byron Castillo no es ecuatoriano, ha sido motivo de burla hasta en su propio país, donde gran parte de su gente les saca en cara que no sean llorones.

Ya en la parte seria, Ecuador no tiene nada que temer. Abogados expertos en derechos deportivos han señalado que las autoridades rectoras del fútbol a nivel mundial no pueden irse en contra de lo que diga la justicia de un país. Y esta dice que Castillo es ecuatoriano. A llorar a otro lado.

¿Qué pasará con el tema de Byron Castillo?

No hay discusión en ese tema, la justicia ecuatoriana ya se pronunció sobre Castillo. La FIFA no se puede inmiscuir en esos temas del país.

Chile, con tal de ir a Catar, recurre a todo tipo de artimañas. Ellos ya lo hicieron con Perú para Francia 98. No pasará nada y la Tricolor estará en el Mundial.