Nuevamente el gobierno se ha visto en la necesidad de declarar el estado de excepción que hace algunos meses se aplicó en los centros penitenciarios del país.

Esta vez la medida, tan necesaria y urgente, ha sido decretada para toda la nación en vista de la violencia desatada en todo el país aprovechándose los grupos vandálicos, que han asaltado, robado y destruido, varios locales comerciales, con motivo de las protestas de los transportistas que se han evidenciado, paralizando la movilización citadina e interprovincial, en contra de las medidas económicas tomadas por el gobierno, siendo uno de los puntos más importantes del paquete la eliminación del subsidio a los combustibles, lo cual ha causado el alza, en más de un 120 por ciento, de las gasolinas y del diésel.

Sin embargo, de esta postura de rechazo de los transportistas paralizando en buena parte el país y creando un clima de inseguridad, el ministro de Finanzas ha sido enfático en declarar que se mantendrá la eliminación de los citados subsidios.

Se espera, por ello, que se lleve a cabo, lo más pronto posible, el necesario diálogo entre el gobierno y los reclamantes buscando superar este estado de violencia en el país.