Desde el lunes de esta semana se sumó Estados Unidos a la vacunación masiva contra el coronavirus comenzando con la población vulnerable de los 50 estados del país norteamericano y se espera que para final de año unos 40 millones de personas reciban el antídoto de este mortal virus que viene afectando al mundo entero desde principios de año.

En Ecuador se espera que este proceso se inicie pronto, pero la ciudadanía especula ya por la distribución de las vacunas. Si la emergencia sanitaria trajo consigo una red terrible de corrupción en medios y altos mandos, se podría esperar lo mismo con respecto a la adquisición del antídoto.

Por lo pronto, las aerolíneas se alistan para el transporte de las vacunas que implica una serie de requisitos que termina siendo un gran reto debido a las bajas temperaturas en la que deben permanecer estas para que no pierdan sus propiedades. Se espera que lleguen al país cinco millones de dosis. El Ministerio de Salud tiene presupuestada la inversión de 200 millones de dólares y el primer cargamento de vacunas será de cincuenta mil dosis.

A diferencia de otros países, Ecuador vacunará primero al personal de primera línea y luego a las personas con enfermedades catastróficas, con discapacidades, policías, militares y luego será vacunado el resto de la población. Ojalá que la pesadilla que se vivió a inicios de este año con la llegada de la emergencia sanitaria no se vuelva a vivir con la adquisición de dicha vacuna.