Opinión
Opinión: Palos de ciego
Julio César Trujillo recibió póstumos honores de Estado, que se los merecía con creces. Una de sus más recordadas frases fue: “Soy un ser humano y reconozco que a veces peco de muy confiado de la gente. No sé si soy bastante ingenuo, o si soy demasiado pendejo...”.
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Cada vez que groseros correístas le gritaban “Viejo ladrón, devuelve lo robado”, él les respondía sin inmutarse mayormente: “Seré viejo, pero no ladrón”... ¡Y es que nadie dudó de su reconocida honradez!
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Pero a Trujillo sí le dolió cuando una iracunda correísta le arrojó un huevo podrido. Eso lo indignó visiblemente, y al poco rato le vino el derrame cerebral, que terminó con su vida pocos días después. Él tenía 88 años, era diabético e hipertenso.
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Trujillo ni se inmutaba ante los reiterados insultos del expresidente Correa, ni tampoco cuando el entonces contralor Carlos Pólit lo condenó a un año de cárcel, junto a los demás miembros de la Junta Anticorrupción, lo cual -más bien- indignó a la gente pensante del país, ante lo cual Pólit tuvo que dar marcha atrás...
(En cambio Pólit, pese a haber sido después condenado a varios años de cárcel, sigue impoluto disfrutando de sus millones en Miami...)
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Según las leyes vigentes, Rafael Correa ya no puede volver a ser candidato presidencial. ¿Pero a vicepresidente, sí?... El Mashi admira la reciente maniobra de la “vivísima” Cristina Fernández en tal sentido, y cree que puede ocurrir algo parecido en el Ecuador.
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¿Qué opinan al respecto los voceros de la Asamblea Nacional y del Tribunal Electoral...?