SUSCRIBIRME POR $1/ 1 MES

Exclusivo
Opinión

Vivir en una ‘ruleta rusa’

Seguimos en indefensión frente a los malhechores que haciendo uso de las armas tratan de tapar nuestra voz de protesta en busca de paz. Tomarse un helado en familia en algún local comercial o mantener una tertulia en una esquina de algún barrio se ha convertido en una especie de ‘ruleta rusa’, ya que no se sabe si estaremos presentes en algún cruce de balas orquestado por algún delincuente o sicario de turno.

De esta ola de violencia no se salva nadie, niños, adultos, ancianos, todos estamos expuestos a perder nuestras vidas en este Ecuador del terror. Autoridades que no se hacen sentir más, aún en pleno estado de excepción, aplicando las mismas estrategias caducas de hace décadas, cuando no existían estas bandas que pelean territorio por microtráfico. Ahora el elegido por el destino fue el velocista Álex Quiñónez, quien perdió la ‘competencia’ más importante de su carrera: la vida.

Este joven nos enseñó con humildad y perseverancia que los sueños se pueden hacer realidad, cuando tomamos la decisión de superarnos, sin importar la condición social o económica por la que estemos cursando. Corrió con los mejores del mundo, dejando a nuestro país en alto, pero lastimosamente la parte oscura de ese mismo país al que representó le dijo ‘hasta aquí nomás’. Así se apagó la vida de este atleta, producto de la decadencia social en la que vivimos, pero también de la desidia de los gobernantes, a quienes poco les ha importado aplicar políticas de Estado para proteger a los ciudadanos.

Gracias Álex por tantas glorias y alegrías que desde el atletismo nos supiste dar. Que tu partida sea de una vez ese el impulso y coraje que necesita esta nación para cambiar todo este desbarajuste provocado por criminales que intentan sembrar el terror y el odio.