Opinión
Palos de Ciego
El expresidente de la República de El Salvador Elías Antonio Saca, ya preso y sentenciado a 10 años de cárcel por corrupción, reconoce que “desvió” más de 300 millones de dólares de los sagrados fondos públicos, y juró devolver por lo menos 25 millones de dólares de una cuenta suya en el exterior (por supuesto, no dijo dónde...). En cambio en el Ecuador están ya tras las rejas el exvicepresidente Glas, 3 o 4 exministros y ciertos altos personajes del “correato”, pero aquí nadie habla de devolver ni un dólar... Mientras tanto, otros “sabidos” están calladitos, disfrutando como nuevos ricos...
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La Asamblea Nacional resolvió, por amplia mayoría de votos (86, pero sin los correístas, lógicamente) anular 3 condecoraciones otorgadas (de acuerdo con el Mashi, ahora en Bélgica) al excontralor Carlos Pólit (prófugo de la justicia); al expresidente de la FEF Luis Chiriboga, detenido por sus “vivezas”, aunque en arresto domiciliario; y a la expresidenta argentina Cristina de Kirchner, a quien la exmandamás de la Legislatura Gabriela Rivadeneira la atosigó con elogios, y ahora aparece seriamente involucrada en atracos por cientos de millones de dólares, mientras su país sufre una grave crisis económica.
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En Bolivia se acaba de inaugurar un enorme edificio que será sede del Parlamento de la moribunda Unasur, y que costó más de 61 millones de dólares, con el lógico apoyo del presidente Evo Morales. Pero la gran mayoría de indignados bolivianos se pregunta qué mismo funcionará allí, cuando 6 o 7 de los 12 países integrantes de Unasur ya han anunciado su retirada. En el Ecuador tenemos un problema parecido.