Recordando el Día del Periodismo Ecuatoriano

Ayer 5 de enero era la fecha magna del periodista que, con inteligente accionar, contribuye y determina el desarrollo integral de la patria ecuatoriana.

Valiente profesión ejercida por mantener incólume el insobornable espíritu de la verdad.

El periodismo nacional es loable vanguardia de causas justas amparadas en la disciplina, ética y solvencia moral del profesional de la comunicación.

Hace 227 años, en 1792, el insigne médico patriota Eugenio de Santa Cruz y Espejo, puso en circulación el primer número del bisemanario Primicias de la Cultura de Quito con aspectos literarios, científicos, educativos, filosóficos, sociales y políticos, contrariando las actividades represivas, discriminatorias y prepotentes del colonialismo español.

Inexorablemente, ahora en el siglo XXI, a pesar de irreflexivos ataques a la libertad de expresión y derecho de libre opinión no han logrado acallar las altivas voces de periodistas descubriendo una serie de latrocinios, actos inmorales e ilícitos hechos a espaldas del pueblo, denigrando la imagen del país ante la comunidad internacional.

El hombre como individuo o pueblo nació para gozar de una absoluta libertad y su único condicionamiento admisible es impuesto por la ley natural.

Ilustremos con sapiencia a la digna y gallarda juventud ecuatoriana. “Si la prensa es cátedra, el periodista tiene que ser el maestro. Si la prensa es tribuna, el periodista tiene entonces que ser orador”.

El maestro y el orador, siendo periodista, es leal defensor del bien y de la verdad enalteciendo la grandeza de la nación.

Por el Lic. Manuel Yagual Mujica