Votaremos resaltando “¡No más impunidad!”

El 4 de febrero próximo, es decir “aquisito nomás”, el pueblo ecuatoriano deberá acudir a las urnas para decidir si se rectifican o no las “maravillas” que durante toda una década había venido haciendo la “revolución ciudadana” y que ameritan más que cambios sanciones severas y muy merecidas para quienes se dieron un festín con los fondos del petróleo y otros ingresos, en una danza de millones que ahora se llaman “propinas o comisiones”, muchas de las cuales incluyendo los beneficios están ahora en el exterior, disfrutando de lo lindo y aprovechando la complicidad de quienes se jactaban de tener “manos” limpias, mentes lúcidas y corazones ardientes”...

La empresa brasileña Odebrecht, encargada del reparto de los “aguinaldos”, ha aceptado en parte su ligereza que quienes fueron favorecidos llaman “comisiones”. Algunas de estas personas están en el exterior y con el dinero a buen recaudo.

Deduzco que el sistema judicial allá funciona de otra manera, porque con tantas “bellezas” era de que hubiesen sonado las alarmas para saber la procedencia de tanto dinero.

Las votaciones del 4 de febrero entrante son, entonces, para decir “no más corrupción”. ¿Es eso todo? O a lo mejor se aplica una medida para sancionar los delitos y que se devuelva lo mal habido, aunque sea una parte de tantos atracos cometidos con fondos públicos.

Hasta allí avanzo porque no quiero salir trasquilado en mi búsqueda de la lana...