Las tensiones entre Washington y Bogotá escalaron nuevamente este miércoles después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lanzara una advertencia directa al mandatario colombiano Gustavo Petro, a quien acusó de mostrarse “bastante hostil” frente a la política estadounidense en la región.

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La polémica se desencadenó cuando Trump, al hablar con reporteros, sugirió que Petro podría enfrentar presiones similares a las aplicadas contra Venezuela si no modifica su postura. “(Gustavo Petro) va a meterse en grandes problemas si no entra en razón”, afirmó. Acto seguido, remató con que si Petro no abre los ojos "será el siguiente".

Las declaraciones se produjeron en medio de la ofensiva militar que Estados Unidos sostiene en aguas del Caribe y el Pacífico, donde Trump ha insistido en que los ataques contra los “narcoterroristas” se expandirán “muy pronto” hacia “otros países”. 

El mandatario republicano también recordó que “Colombia es un gran productor de drogas es decir, de cocaína”, y reveló la incautación de un “gran” petrolero cerca de Venezuela, sin ofrecer más detalles.

Interrogado sobre si mantendría una llamada con Petro —como lo hizo con Nicolás Maduro—, Trump aseguró que no lo ha “pensado mucho”.

Petro respondió: “Trump es un hombre muy desinformado de Colombia”

Las palabras del presidente estadounidense no tardaron en recibir respuesta desde Bogotá. Durante una sesión del Consejo de Ministros, Gustavo Petro aseguró que Trump desconoce por completo la realidad colombiana y el esfuerzo de su gobierno contra el narcotráfico.

“Trump es un hombre muy desinformado de Colombia. Es una lástima, porque desecha el país que más sabe de tráfico de cocaína, parece que sus interlocutores lo engañan por completo”, afirmó.

Petro recalcó que su administración ha logrado cifras históricas en la lucha antidrogas, entre ellas la incautación de 2.700 toneladas de cocaína desde el inicio de su mandato, que concluirá en agosto de 2026. También sostuvo que la desinformación proveniente de Washington conduce al presidente estadounidense “a frases y acciones que no se pueden ejercer sobre un presidente elegido democráticamente por la mayoría de la sociedad colombiana”.

El mandatario incluso ironizó sobre la expectativa diplomática: “Ya no espero que me inviten a Washington, sino que Trump venga a Colombia a ver qué es un laboratorio de cocaína, cómo se destruyen nueve al día y cómo incautamos drogas por decenas de toneladas”.

El cruce verbal se suma a meses de fricción entre ambos gobiernos, especialmente desde que Estados Unidos intensificó su despliegue militar en el Caribe y el Pacífico con el argumento de frenar el tráfico de drogas. En la zona, fuerzas estadounidenses han destruido 23 embarcaciones presuntamente vinculadas al narcotráfico, acciones en las que han muerto al menos 87 personas.

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