La ‘pateadora’ más buscada de Perú está libre como el viento. Pamela Cabanillas anunció que se entregaría a las autoridades; sin embargo, hasta el momento, no tiene ningún impedimento para movilizarse por Europa.

En una entrevista con un medio de comunicación de su país, la joven, que estafó a unas ocho mil personas con entradas falsas para el concierto de Daddy Yankee, reveló cómo fue liberada, pese a los delitos cometidos.

“No me he arrepentido de entregarme a la justicia, no me aceptaron las autoridades europeas”, señaló Pamela, de 18 años, y agregó que le dijeron que “no tenía una orden de captura y que solo era una alerta azul para saber su ubicación”.

Al ser consultada respecto de si era una de las personas más buscada por las autoridades, Cabanillas dijo que eso no sería así, puesto que cuando fue al Consulado de Perú solo le pidieron su número telefónico.

Según se conoce, ni la Policía ni los consulados pueden detenerla mientras no exista una orden de captura. Sin embargo, su situación en Europa no sería la que muchos imaginan e incluso se mostró arrepentida: “Quiero pedirle perdón públicamente a mi papá, a mi mamá y a mi familia porque sé que están pasando un mal rato por mis malos actos. (...) Quiero pedir perdón a la gente a la que he hecho daño”, expresó.

Según detalles del jefe de la División de Investigación Estafas, José Manuel Cruz Chamba, Pamela usó a tiktokers, influencers y otras personas de su confianza -algunos sin saber del ‘modus operandi’- para ofrecer y garantizar la venta de los boletos a sus víctimas.

Previamente, la peruana y un grupo de revendedores -hasta ahora no identificados-adquirieron entradas verdaderas y luego las clonaron a través del código QR. Es decir, que un solo ticket llegó a manos de varias personas pero en forma de copias. Este proceso se repitió hasta 367 veces con una sola entrada.

Pamela advirtió que se viene otro grupo grande de estafados por el concierto de Bad Bunny, el 13 y 14 de noviembre. Además, sostuvo que promociona eventos en redes sociales para “sobrevivir”, pues no tiene dinero para volver al Perú.