Con precios que varian desde los 113 dólares los más 'turritos', hasta los superiores 1.500 dólares, los generadores eléctricos y plantas de luz han surgido en esta época de apagones como una 'salvación' para quienes necesitan luz eléctrica en sus actividades diarias. No obstante, sin las recomendaciones apropiadas, este producto puede llegar a ser la 'perdición'.

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La mañana del miércoles 24 de abril en Cayambe, al norte de Quito, una mujer y su hija de 7 meses perdieron la vida tras inhalar gases tóxicos producidos por una planta de luz. El artefacto se encontraba en una habitación cerrada junto a las víctimas. Este trágico suceso subraya los peligros del uso indebido de estos dispositivos.

Manuel Álvarez, PhD, docente investigador de la Facultad de Ingeniería en Electricidad y Computación de ESPOL, brindó algunas recomendaciones a EXTRA sobre cómo manipular y manejar estos generadores que, según explicó, emiten gases contaminantes para los humanos, como el monóxido de carbono.

"Se recomienda instalar el generador de manera responsable en un lugar abierto, como un patio", sugirió el especialista. Sin embargo, señaló que muchos comercios los colocan en la calle, lo que también representa un peligro para los transeúntes, especialmente para los niños, ya que el monóxido de carbono es inodoro e insípido, lo que dificulta su detección.

Respecto al combustible utilizado por estos aparatos, Álvarez aconseja no usar aditivos ni mezclar combustibles, ya que esto puede dañar el motor del generador y crear riesgos de incendio.

El docente también recalcó que aquel que lo compra "tiene responsabilidad social" de colocarlo en un lugar donde no afecte a los demás.

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