“Oye, anda a ver a tu hermano, que está muerto”. Esa fue la frase que le gritaron a Joffre Mayorga cuando se alistaba a descansar en su domicilio, ubicado en el sector Los Almendros de la parroquia Isla de Bejucal, en el cantón Baba, provincia de Los Ríos.

La muerte de Félix Ismael Mayorga Vera, de 29 años, ocurrió a las 20:30 del lunes 8 de mayo, en medio de una ráfaga de disparos que alertó a todo el barrio.

Con base en las averiguaciones que hizo Joffre, se conoció que los asesinos llegaron en moto al sitio donde estaba su familiar consumiendo sustancias estupefacientes y le propinaron cuatro disparos. Luego huyeron vía a Vinces.

El individuo, que era conocido como Mano Amarrada, quedó boca abajo hasta que llegó la policía a realizar el levantamiento de su cadáver. “A él le decían así porque un tío le cortó en el antebrazo y utilizó una venda por un largo tiempo”, explicó su deudo.

Los investigadores buscaron indicios en el sitio para esclarecer el crimen. Sin embargo, los deudos tenían sus propias hipótesis. Una estaba relacionada con el robo de un celular. La otra, una amenaza por parte unos sujetos a quienes la víctima habría denunciado como expendedores de droga y portadores de armas.

La última vez que lo vieron con vida fue la tarde de ese mismo lunes, cuando degustaba una salchipapa en la esquina donde vendía chicharrón. Así se ganaba la vida y además sacaba para el vicio, manifestaron los familiares.

Sus hermanos aseguraron que por la droga perdió el empleo e incluso hasta empeñó la cédula, documento que les hizo falta para realizar los trámites mortuorios. (TOF)