Las ferias y las fiestas masivas eran sus lugares de 'trabajo'. Paola de 42 años, Nancy de 36 años, Lucia de 41 años, Carol de 18 y Leslie de 22, preferían los sitios con aglomeraciones de personas para robar sus pertenencias.

Pero como no hay delito perfecto, las cinco mujeres, de nacionalidad colombiana, que formaban parte de una banda delictiva dedicada al robo, quedaron al descubierto en el reciente feriado de carnaval.

Las mujeres aprovechaban la distracción de las personas que festejaban para meterles la mano y llevarse sus celulares y otros objetos de valor. Pero la tarde del miércoles 2 de marzo se les terminó la fiesta, ya que fueron detenidas. Al menos 18 personas reconocieron haber sido sus víctimas -en su mayoría varones-, quienes no dudaron en denunciarlas.

¿Cómo actuaban?

El coronel Marco Antonio Muñoz, jefe de la Subzona de Tungurahua, relató que personal de inteligencia les seguía la pista a las cinco mujeres de nacionalidad colombiana quienes se movían entre Ambato, Patate y Pelileo.

Todas cumplían un rol. Cuando identificaban a sus víctimas, una se vestía de manera provocativa para atraer la atención si era solo hombre, mientras que las otras se acercaban y se llevaban las billeteras o celulares. Mientras que, a los más distraídos ya sean hombres o mujeres, solo les arranchaban sus pertenencias y luego huían, se escabullían y cambiaban de ropa para evitar ser identificadas de inmediato.

Personal de la Unidad Nacional de Investigaciones de Delitos Contra el Derecho a la Propiedad (BAC) llegó desde Quito para colaborar en la desarticulación de esta banda delictiva femenina.

Una vez que fueron detenidas, al menos 18 personas las identificaron y acudieron a denunciar en la Fiscalía de Flagrancia. De acuerdo al coronel, las mujeres solo utilizaban Tungurahua como zona de paso, ya que se hospedaban en un hotel en Ambato, donde ocultaban lo robado. Presumen que hacían el mismo trabajo en otras ciudades, lo cual están investigando.