Andy Rafael Ochoa Coello no pudo evadir por segunda vez a la muerte. La noche del jueves 8 de junio fue asesinado a tiros afuera de un centro comercial ubicado en el norte de Guayaquil. Sin embargo, un día antes, la tarde del miércoles, ya había sido víctima de un atentado del que logró salvarse porque estaba acompañado de otras personas.

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De acuerdo a información proporcionada por familiares a la Policía, Andy, de 26 años, el miércoles 7 de junio fue abordado por varios sujetos que iban a bordo de una camioneta negra doble cabina Ford 150.

"Unos hombres intentaron bajarse del vehículo, pero al verlo con varias personas se retiraron. Le dijo a su pariente que desconocía los motivos. El occiso presuntamente trabajaba como mecánico, según nos informan sus cercanos", explicó una fuente policial.

La allegada le indicó a los investigadores que Andy Rafael estuvo detenido 5 años por robo. En la página de la Función Judicial consta que registraba cinco procesos judiciales, tres por robo (2015, 2016, 2022) y dos por tenencia de armas (ambos en el 2019, en abril y en septiembre).

La noche del ataque recibió dos impactos de bala en la cabeza, presentaba orificios de entrada y salida del proyectil. En la escena del hecho se encontraron seis vainas percutidas, calibre 9 milímetros.

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La víctima mortal, aguardaba en el exterior del centro comercial a un familiar. Una mujer que pasaba cerca al lugar del suceso también fue alcanzada por una bala. "Tenía antecedentes por arma y droga, seguramente, pudo haber tenido algún otro tipo de vínculos criminales, eso se está investigado", agregó el informante.

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