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Cóndores de Mónaco, sin miedo y con valores

Los menores y sus padres resaltaron cómo les cambió la vida la práctica del rugby. Al inicio tenían temor por el contacto, pero ahora lo disfrutan.

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Los integrantes de las escuelas de rugby demostraron sus habilidades. Disfrutan al practicar este deporte.GUSTAVO GUAMÁN / EXTRA

Al grito de “rugby con r de respeto”, cientos de niños y niñas se alistan para demostrar sus conocimientos sobre este deporte en la cancha del estadio Rodrigo Paz Delgado, de Liga de Quito.

Son los beneficiarios de las escuelas Cóndores de Mónaco que por segundo año consecutivo lleva adelante la fundación Huma Rugby, con el respaldo de la Fundación de la Princesa Charlene de Mónaco.

Los menores de los barrios La Mena 2, Caupicho, Músculos y Rieles, La Argelia y San Francisco de Auqui disfrutan en el gramado del escenario deportivo y se sienten campeones. Dominan con facilidad el balón ovalado y en cada jugada demuestran su habilidad y gran velocidad.

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“Al inicio tenía un poco de miedo porque me dijeron que era de empujarse. Estaba indecisa, hasta que vi la primera clase, el cuidado que tenía el profe y me quedé tranquila”, contó Roxana Olvera, quien con felicidad ve a sus pequeños Axel (9 años) y Jeremy (5) disfrutar de esta disciplina deportiva.

Detalla que la presidenta del barrio Músculos y Rieles, al sur de la capital, fue quien les compartió la invitación para ser parte de la escuela.

Roxana destaca que ahora sus hijos son más sociables gracias a los valores que se inculcan en las clases de rugby. “Cuando tenían un cumpleaños no les gustaba participar, lloraban. Ahora eso ha cambiado. La escuela de rugby los ha ayudado a controlar la frustración, a disfrutar de cada actividad”.

EXPERIENCIAS

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Roxana Olvera junto a sus hijos Axel y Jeremy, quienes forman parte de la escuela de rugby.GUSTAVO GUAMÁN / EXTRA

Los padres de familia siguen con atención cada jugada y alientan a su pequeños entre los que se encuentran Michelle Quijije, de 14 años.

“Me llamó la atención aprender un nuevo deporte. Me gusta que resaltan el respeto y al disciplina. Ya no soy tan distraída, lo que me ha ayudado en el colegio”, detalla la deportista que forma parte de la escuela en Guamaní, al sur de la ciudad.

Entre los que mayor experiencia tienen se encuentra Jandry Cueva, de 11 años, quien vive en el barrio La Mena 2, al norte de la urbe.

“Ya voy dos años en la escuela. Aquí aprendí a pedir disculpas si hay una jugada fuerte, lo que no pasa en el fútbol. También me gusta la disciplina que nos enseñan y que haces bastantes amigos”, comenta Jandry que este año junto a 11 compañeros tuvieron la oportunidad de viajar a Mónaco para participar en un torneo sub-12.

Ecuador fue el único país de América que participó en el campeonato organizado por la Fundación de la Princesa Charlene, que renovó esta invitación para el próximo año.

GRAN CRECIMIENTO

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Los pequeños deportistas demuestran la disciplina y el respeto que les inculcan.GUSTAVO GUAMÁN / EXTRA

El 2021 inició el proyecto de Cóndores de Mónaco con 120 menores de los barrios La Mena 2 y San Francisco de Auqui. Para este año se aumentaron tres sectores y el número de beneficiarios creció a 350.

Said López, director de esta iniciativa, señala que originalmente para la segunda edición de las escuelas se tenía planificado recibir a 250 niños de localidades periféricas de la capital, pero se rebasaron las expectativas.

“Hemos recibido comentarios positivos de parte de los padres y de los dirigentes de los barrios. Al inicio se asustan al escuchar que es como el fútbol americano, pero no es nada de contacto. Se realizan ejercicios de rugby para inculcar valores como respeto al amigo y al contrario, y el trabajo en equipo”, destaca.

Ahora ya planifica lo que será la siguiente temporada con la mira en llevar a más niños al torneo en Mónaco, para lo que pide el apoyo de empresas públicas y privadas para adquirir los pasajes aéreos con el fin de que los deportistas vivan nuevas experiencias que les ayudarán en su vida.