Lo que se viene en el Clásico del Astillero,el 6 de diciembre del 2020,  será jugarse la vida del 2020. Barcelona y Emelec llegan con 21 puntos y +11 de gol diferencia.

Será un partido en el que empatar o perder es meterse en problemas, sabiendo que Liga de Quito tiene 20 unidades y está esperando un resbalón de los elencos del Astillero.

Y al fin, el sufrimiento del DT Fabián Bustos esta vez solo duró 48 minutos, hasta que William Riveros abrió el marcador.

Luego se vino lo mejor. A los 72 minutos los astros se alinearon y pasó algo espectacular: la sal salió del cuerpo de Jonatan Álvez. Al fin el uruguayo lograba su gol, que tenía rato buscando. De cabeza colocó el 2-0 y le dio tranquilidad al equipo.

Y para dejar totalmente tranquilos a los hinchas, el defensa Gustavo Vallecilla se mandó el suyo, para que Barcelona gane 3-0 y Bustos pueda terminar su partido ‘relax’.

Barcelona llega al Clásico con todo, ante un Emelec que viene en racha. En ese cotejo lo que no puede existir es un empate, porque eso les daría toda la pista libre a los albos (que tienen 20 puntos) para que sean campeones directos.

Macará no trajo a Leonel Quiñónez, para que “la gente no hable cosas”, porque el jugador será parte del Ídolo en el 2021.