La cantante ecuatoriana Andreína Bravo  tuvo un acercamiento con los papás de la colombiana Karol G, Marta Navarro y Guillermo Giraldo, quienes le mencionaron que ella tenía todo para triunfar. Incluso él aseguró que pronto la vería en un escenario.

Andreína coincidió con ellos la semana pasada en Cap Cana, República Dominicana, donde recibió un reconocimiento como Artista Tendencia en la séptima edición de los premios Heat Latin Music Awards.

“Sentí como si me dieran la bendición. La señora reacciona a mis historias de Instagram y está pendiente de mí. Me dijo que su casa en Medellín (Colombia) está abierta para mí. Trato de pedirle consejos, pero no muchos, porque luego pensará que la molesto”, contó emocionada la intérprete de ‘Bandolera’.

Y no solo admira a Karol por su calidad artística, también por la cercanía que tiene con su familia. Contó que la Bichota suele llevarse a sus padres a la mayoría de giras musicales. Ella también lo quiere hacer, aunque la han criticado por aparecer en la mayoría de eventos con sus progenitores.

“No me importa que me digan mimada, consentida o de todo. Si Karol G se lleva a sus papás a todas parte, ¿por qué yo no? Siento que voy por buen camino. Soy hija única y mis padres son mis mejores amigos”, explicó.

En la gala de los Premios Heat 2022, Andreína bajó del escenario tras recibir el galardón y le hizo una videollamada a su mamá.

Con respecto a los buenos y malos comentarios dice: “Hay días en los que todo me resbala, pero hay otros en los que me levanto un poco desanimada. Pido a la gente que sea un poco empática porque todos estamos luchando por nuestros ideales y sueños (...) A veces me duele porque creen que una por estar en una cámara es perfecta, pero no es así. Todos somos imperfectos”.

NO HA CELEBRADO

Andreína ha descansado poco. Dijo ser “tan perfeccionista” que cuando estaba en República Dominicana le dijo a su equipo que luego de la premiación se irían a celebrar hasta más no poder. Pero no fue así.

“Me quedé arreglando las maletas para agarrar el vuelo en la mañana. Tenía miedo de estar mareada y quedarme del vuelo. Cuando llegué a la discoteca todo se había terminado y ya estaban cerrando”.