Con heridas leves en el rostro, asustado, pero con vida, se halla un hombre de unos 35 años, que se salvó de milagro de al menos ocho disparos de arma de fuego propinados por uno de cuatro sujetos que lo persiguieron a bordo de un auto color plomo.

Fue a eso de las 22:30 del lunes 30 de mayo del 2022, cuando la víctima retornaba a casa manejando una camioneta de su propiedad. Al llegar a las calles Estévez de Toral y Héroes de Verdeloma, noroeste de Cuenca, fue interceptado por el carro de los sospechosos. Uno se desembarcó y apuntando a la ventana del conductor, disparó un arma de fuego.

Los disparos impactaron en el vidrio y la puerta lateral izquierda del automotor de la víctima, pero ninguno de los tiros llegó a la humanidad del hombre, que perdió el control del vehículo y se impactó contra un auto que estaba estacionado en los exteriores de su vivienda. El sonido de las balas y del impacto del coche conta el auto, habrían hecho que quienes intentaban matarlo, se asusten y huyan del barrio con rumbo descocido, sin haber podido dar muerte a su víctima, quien resultó con cortes el rostro, y fue atendido por socorristas de cuerpo de bomberos.

En el barrio nadie quiso pronunciarse sobre el hecho, pero dejaron sentir el miedo y terror que reina el país a hechos de sicariato.

La identidad de la víctima, se mantiene en reserva mientras la Fiscalía con la colaboración de la Policía, inició el proceso investigativo para determinar el móvil del presunto sicariato fallado, y la identidad de los presuntos autores.