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Judicial
Socio Vivienda se volvió una guarida para esconder a secuestrados en Guayaquil
Otra vez retuvieron a ciudadanos en el plan habitacional del noroeste de Guayaquil. Seis personas estuvieron retenidas allí en este mes
Durante el fin de semana, dos casos de secuestros terminaron resueltos con un final feliz, en Guayaquil. En uno de ellos hay un factor común: el rescate fue en Socio Vivienda, un sector del noroeste de la ciudad en el que con frecuencia mantienen a personas retenidas.
La liberación en esa zona de la ciudad fue anunciada por Fausto Salinas, comandante general de la Policía Nacional del Ecuador. “Con valor y dedicación trabajan nuestras unidades investigativas, lo cual ha permitido liberar a 3 personas quienes se encontraban secuestradas, en Socio Vivienda”, informó el sábado en Twitter.
Posteriormente, no hubo un pronunciamiento policial al respecto. No es la primera vez que ocurren estos casos en ese plan habitacional guayaquileño. El 12 de marzo, gendarmes fueron a la etapa 2 para rescatar a un taxista que fue raptado dos días antes. Lo curioso es que en el domicilio en que se encontraba había dos víctimas más del mismo delito.
En Guayaquil, policía fue a liberar a un taxista secuestrado y halló a otras dos víctimas
Anteriormente, otros ciudadanos fueron retenidos contra su voluntad en Socio Vivienda. ¿Pero por qué la zona es utilizada para retener a personas?
Stalin Sacoto, exagente de Inteligencia de la Policía y experto en seguridad, indica que una de las posibles razones es que en el lugar no existe el equipamiento tecnológico necesario para realizar un correcto seguimiento de actividades sospechosas.
“Se debería poner más iluminación y más cámaras ‘Ojos de Águila’. Si están llevando a personas retenidas para allá, puede ser porque las cámaras de seguridad de la zona están desactivadas”, explica.
Con la certeza de que no están siendo vigilados, los criminales podrían estar alquilando casas para retener a las víctimas, dice. Añade que la vigilancia tecnológica en el sitio se debe complementar con patrullajes, que permitan disuadir a los malandrines y recuperar el espacio.
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El experto también refiere que para frenar este tipo de delito se necesita endurecer la sanción con la que se lo castiga y, además, que la Justicia evita la impunidad investigando y sentenciado.
OTRO CASO
Horas después, en la cooperativa Lotes de La Alegría, por el sector de la Juan Montalvo, tres personas fueron detenidas, entre ellas una mujer, en un vehículo en el que tenían raptado a un hombre. También tenían un arma en su poder. Ahora se los investiga por secuestro extorsivo.
