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¡Alto a los escolares que hagan relajo en la ‘metro’!
La Subsecretaria de Educación anuncia a EXTRA que la Fundación Metrovía podrá concienciar en planteles fiscales, tal y como había solicitado.

El peligro ronda a quienes corren tras los buses para no pagar el pasaje.
Tras dos años de campañas por separado, que no lograron frenar un problema extendido por numerosos puntos de Guayaquil, se abre un marco de colaboración entre la Subsecretaría de Educación y la Fundación Metrovía para intentar erradicar la evasión de pasajes, los daños a las instalaciones, la tenencia y consumo de drogas o las agresiones a guardias y entre escolares.
La máxima responsable educativa en la zona 8, Érika Laínez, anunció a EXTRA que la entidad de transporte urbano podrá impartir charlas de concienciación en los planteles fiscales, tal y como había solicitado.
A falta de conocer los materiales que la fundación empleará en las sesiones, los técnicos encargados de la recaudación y el monitoreo de los buses destacaron que esta línea de trabajo ya se ha probado con éxito en Bogotá. Así se lo trasladaron sus colegas colombianos en un reciente encuentro virtual.
El pasado domingo, este Diario plasmó la gravedad de un fenómeno que sucede a diario en veinte paradas de las tres troncales, sobre todo cuando los colegios echan el cierre. Durante un recorrido por algunas de las zonas más conflictivas como Guasmo Norte o La Pradera 1 y 2, constató cómo cientos de estudiantes se lanzaban a la vía, esquivaban a los carros y las motos a la carrera y se colaban en las estaciones para no abonar los 15 centavos marcados como tarifa. Casi siempre se infiltraban cuando las unidades se detenían para recoger pasajeros y se abrían las compuertas de las terminales.
El gerente de la Fundación Metrovía, Leopoldo Falquez, comentó entonces que se habían producido los primeros contactos interinstitucionales con la propia Subsecretaría, la Policía Nacional y la Dinapen. Pero estaba a la espera de que el equipo de Laínez le confirmara si podría ampliar su campo de acción a los centros educativos públicos (hasta ahora, la entidad solo podía trabajar en los privados).
En un acto de la campaña escolar ‘Yapana’, celebrado el pasado viernes en el Malecón Simón Bolívar, la subsecretaria confirmó que el cronograma de trabajo se concretará en los próximos días, y que las cuatro instituciones colaborarán de forma mancomunada. “La idea es disminuir esta brecha de violencia que se produce realmente en los espacios de la metrovía. Sabemos que es la mejor manera de que el estudiante tome conciencia. Y si amerita una sanción, la vamos a aplicar con toda la rigidez que se deba hacer”, subrayó enfática.
Sin embargo, Laínez, al igual que Falquez, no abogó por recurrir al empleo de la fuerza contra los infractores; dijo no tener datos exactos sobre la posible implicación de pandillas y bandas en estos episodios, tal y como sostienen algunos técnicos de mantenimiento; y no entró a valorar muy a fondo por qué han hecho falta dos años para que las autoridades unan sus fuerzas.
“Si observamos alguna irregularidad mucho más allá de las infracciones que están dentro de nuestro código, activamos un protocolo de violencia con el Departamento de Consejería Estudiantil, donde se ven implicadas otras entidades como el ECU-911, la Dinapen... Ahí vamos viendo qué acciones tomar, porque podrían llegar a ser judiciales”, remató.