¡30 minutos bajo el carro!

Edisson Aleaga Ramírez, Guayaquil
“Sáquenme de aquí”,   rogaba desesperadamente Carla, una mujer de aproximadamente veinte años, quien desde el interior de un vehículo volcado en el viaducto de La Prosperina -norte de Guayaquil-, hacía esfuerzos sobrehumanos para que alguien la escuchara.
Afuera, media docena de bomberos de la División de Rescate usaba toda su habilidad para extraer a la mujer del carro.
Eran las 06:05 de ayer. El vehículo Toyota, de placa GNC-318, que aprisionaba a la joven mujer, se había accidentado quince minutos antes.
“¡Mi amor, ya vas a salir!”, repetía un joven sin camisa, a quien los paramédicos le curaron las heridas del brazo derecho, supuestamente causadas durante en el percance.
Testigos aseguraron a los agentes que él conducía el auto en el que Carla viajaba como copiloto. Dijeron además que se desplazaban a exceso de velocidad en sentido sur-norte, y que en la división del paso elevado, el conductor del Toyota “se dio de frente contra el muro”. El automotor terminó volcado y uno de los neumáticos se salió de su eje y terminó a varios metro de ahí.