En medio de un proceso judicial que ha captado atención nacional, el alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, se pronunció públicamente sobre las investigaciones que enfrenta dentro del llamado caso Triple A. La causa está relacionada con presuntas irregularidades en la comercialización de combustible subsidiado.

La Fiscalía General del Estado lo vinculó formalmente al proceso el pasado 9 de abril, tras presentar cargos en su contra por supuesta comercialización, almacenamiento y distribución de diésel subsidiado sin autorización. La instrucción fiscal, según adelantó el propio Álvarez, concluirá el domingo 11 de mayo.

Asegura que no hay pruebas en su contra

Durante su enlace radial semanal, transmitido este miércoles 7 de mayo, el alcalde aseguró que el proceso judicial en su contra carece de sustento y que incluso personas que no comparten su posición política han considerado que se trata de una persecución.

“A partir de ahí (11 de mayo), el que más quiere que se vaya a la audiencia para la supuesta preparatoria de juicio soy yo. ¿Con qué elementos me van a llamar a juicio si no hay?”, expresó el funcionario.

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En esa misma intervención, Álvarez cuestionó los argumentos presentados en la audiencia pasada. Según explicó, uno de los elementos en su contra es haber actuado como representante legal de una empresa comercializadora de combustible, lo cual, según dijo, forma parte de la naturaleza misma del negocio.

“(En) la última audiencia, los elementos eran de que yo era representante legal y afiliaba a estaciones de servicio. Obvio, si ese es el espíritu de tener una comercializadora de combustible, tener que afiliar a terceros. Si algún tercero ha cometido algún delito, yo, ¿qué culpa tengo?”, sostuvo.

Respondió sobre una posible detención

Álvarez afirmó que mantiene la tranquilidad respecto a las etapas siguientes del proceso, el cual, insistió, está en manos de su equipo legal. En su mensaje, reiteró que no existen pruebas materiales que lo vinculen con tráfico de combustible o enriquecimiento ilícito.

“Demuéstrenme que ha habido tráfico de combustible. No hay. Demuéstrenme que tengo 100 millones de dólares, como dijo el señor Neira, por tráfico de combustible. No existe”, añadió.

Respecto a la posibilidad de que se le imponga prisión preventiva, el alcalde fue enfático en señalar que permanecerá en el país y rechazó cualquier comparación con figuras criminales. “No tienen por qué dictar prisión preventiva. ¿Acaso soy Fito yo?”, manifestó en alusión a José Adolfo Macías Villamar, alias “Fito”, identificado como cabecilla de la organización criminal Los Choneros.

Su llamado a mantener la estabilidad institucional

En su mensaje final, Álvarez hizo un llamado a preservar la estabilidad en los gobiernos locales, especialmente tras el reciente proceso electoral presidencial. Destacó la importancia de que municipios y prefecturas puedan acceder a los fondos correspondientes para ejecutar sus obras.

“Más allá de las peleas, que hay que evitarlas, más allá de ser oposición seria y justa, ante cualquier causa que lo amerite, pero necesitamos estabilidad para cobrar los recursos de los municipios, para poder llevar la obra a la ciudadanía”, dijo.

Con el cierre del periodo de instrucción fiscal previsto en pocos días, el caso Triple A podría avanzar hacia una audiencia preparatoria de juicio. En ese contexto, las declaraciones del alcalde apuntan a defender su gestión y desvincularse de cualquier actividad ilícita, mientras las autoridades judiciales continúan evaluando los elementos del proceso.

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