En Guayaquil, un brutal choque acabó con la vida de una niña

“¡Fueron a poner gasolina, no a encontrar la muerte!”, exclamaba consternada Mercedes Izquierdo.

Su marido, Alejandro Molina, era el taxista que transportaba a Peter Madrid; la esposa de este, Pamela Cedeño, y las dos hijas de la pareja. La menor de ellas, de dos años, falleció al ser trasladada al Hospital del Niño Francisco de Icaza Bustamante. La causa, según el informe del Cuerpo de Bomberos, fue el traumatismo craneoencefálico sufrido en un brutal accidente de tránsito.

El siniestro ocurrió a las 16:30 del domingo 21 de mayo en la intersección de Ayacucho y Carchi, sur de Guayaquil, según señalaron fuentes de la CTE. En él se vieron implicados un bus de la línea 94 y el auto que manejaba Molina.

El sargento de la OIAT Miguel Herrera señaló que aún se investiga cuál de los dos vehículos se saltó una luz roja. Y, por los datos recabados en el lugar de los hechos, se supo que el resto de los ocupantes del taxi sufrieron heridas de consideración.

El agente también indicó que el impacto fue perpendicular, de modo que el bus arrastró por veinte metros al carro para terminar dentro de una gasolinera. Por suerte, no colisionó con ningún surtidor.

Aunque Herrera precisó que el conductor del bus fue detenido, los primeros testimonios recopilados no sirvieron para esclarecer quién había sido el responsable de lo ocurrido. Por eso, habrá que esperar a que termine el proceso para conocer lo que realmente sucedió. Además, dos carros fueron retirados del sitio.

Taxi paró primero en la gasolinera

Mercedes Izquierdo, la esposa del conductor del taxi siniestrado, señaló que la familia Madrid había salido desde su casa, ubicada en Lizardo García y Brasil. Primero, el vehículo fue a abastecerse de combustible a la misma gasolinera donde acto seguido terminaría el bus. Y poco después, se produjo la tragedia.

La señora, quien recibió la aciaga noticia por teléfono, espera que las autoridades investiguen el caso y lo esclarezcan.