Este 7 de diciembre la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha decidido reunirse para analizar la viabilidad de realizar los ensayos de desafío humano para acelerar el proceso de las vacunas contra el escalofriante coronavirus.

Pero este desafío ha generado mucho ‘pito’ porque hay quienes están a favor y en contra. Por ejemplo, lo que se oponen mencionan que existe un gran riesgo en contagiar a voluntarios que no tienen el virus, ya que aún no existe cura para esta enfermedad.

Mientras tanto, lo que defienden este proyecto aseguran que los riesgos a los que se exponen los voluntarios son mínimos y más bien sería de mucho beneficio para la sociedad.

En mayo pasado, la OMS emitió un documento para que se llevara a cabo este procedimiento donde debe destacar una justificación científica y una evaluación de los potenciales riesgos y beneficios, siendo los últimos de mayor importancia.

En cuanto a la selección de participantes debe limitar y minimizar los riesgos, mientras que los resultados tienen que ser revisados por un comité especializado independiente.