Ahuyenta esa tierra prometida de las ‘ofertas’ que no existen

Esas rebajas con engaño no es algo que solo suceda en Latinoamérica sino también ‘cruzando el charco’, es decir, de lado europeo. Pasa tanto —no estás solo en esto amigo— que la bloguera Sofía Macías, autora del libro ‘Pequeño Cerdo Capitalista’, les dedica unas líneas de su texto para combatirlo y los llama “gasto con descuento”.

Una encuesta de la Facua, una organización ciudadana de consumidores en España, revelaba que en 2017 un 88% de los usuarios detectó alguna trampa en las súper ofertas. ¡Exacto! Esas que emocionan, seducen hasta hacerte entrar y te hacen ir como hipnotizado hasta tocarlo, autoconvencerte de que lo necesitas y que ya en caja, cuando sacas la tarjeta o los billetes, repetirte en coro: Fue una buena compra.

Es por ello que Macías, quien es especialista en Finanzas, quiere terminar con el mito de que comprando esas ‘gangas’ le ayudas a tu economía. Tarea para repetir en una plana mental: ¡Ni en tus sueños!

“Los ahorros sólo son ahorros cuando tenías una compra planeada y esperas a que la rebajen para hacerla, no cuando algo se te aparece con una de esas infames etiquetas de “-10%” o “3 X 2” y no puedes dejar pasar la oportunidad... de gastar de más”, escribe la bloguera mexicana en el primer capítulo de su libro.

Pero vaya, sentir que compraste algo de ‘oportunidad’ rejuvenece ese espíritu ansioso, pero no aumenta tu dinero. Es por esto que el Pequeño Cerdo Capitalista advierte: “Si las baratas realmente funcionaran y fueran un ahorro, la gente que es adicta a ellas tendría una cuenta bancaria de seis ceros”.

Lo otro es que por lo general, los colores en amarillo con blanco o rojo, negro y blanco atraen y mucho más promete algo hermoso: del 50% al 70% de descuento. Respira y déjalos que se queden, no permitas una atracción fatal con tu billetera.

Ya como para no volver a caer en esos ‘pecados económicos’, el blog Coinc, pensado también para ahorradores o un intento de este prototipo de personas, deja cuatro consejos básicos para cumplir con el reto de no regresar a ver eso que seguramente no saliste a buscar.

– No compres por impulso.

– Busca y compara.

– Prepárate con antelación.

– Haz cálculos. “¿De verdad te merece la pena conducir 200 km, gastar gasolina, comer fuera y soportar las aglomeraciones para ahorrar 18 dólares de un artículo de 100?”, dice parte del blog.

Ya con todo esto más que explicado dile no al maltrato de la quincena o el fin de mes.