Estudiaban a sus víctimas. Sitiaban sus terrenos para, de madrugada, hurtarles el ganado. Quienes ‘pagaban’ eran adultos mayores, a quienes les ‘hacían cerebro’: veían si vivían solos, en sitios con poca luz y deficiente señal de celular.

Pero así como les hacían seguimiento a sus ‘patos’, agentes iban detrás de sus pisadas y la madrugada del 29 de septiembre capturaron a cuatro sospechosos de abigeato.

El teniente coronel Cristhian Salazar, jefe de la Unidad de Investigación Contra el Abigeato, contó que hace cuatro meses empezaron a seguirles la pista a estas cuatro personas, todas ecuatorianas, quienes operaban en las provincias de Chimborazo, Tungurahua, Cotopaxi, Bolívar y Pichincha.

En muchas de las ocasiones, los detenidos se hacían pasar como futuros compradores, con el fin de observar las vulnerabilidades de las viviendas.

Para arrestarlos se realizaron operativos simultáneos en Ambato, Quero y Salcedo, la madrugada del 29 de septiembre, y fueron aprehendidos tres hombres y una mujer. El coronel aseguró que todos tienen antecedentes penales por delitos similares y robo a personas.

Es la primera organización delincuencial dedicada al abigeato que se captura en Tungurahua, en el año; en el país ya suman 60 detenidos por esta causa, dijo el teniente coronel.

En coordinación con la Junta del Campesinado se alertó a los comuneros afectados por robo para que acudan hasta la unidad de flagrancia, en Píllaro, a reconocer a los sospechosos, cuya audiencia de formulación de cargos estaba prevista para la tarde del jueves 29 de septiembre.

Ángel Chiluiza, presidente de la Junta del Campesinado de Santa Rita en Píllaro, expresó que están alertas y organizados con rondas nocturnas, pero aun así los ladrones de ganado y de animales menores se las ingenian para perjudicarlos. El abigeato es uno de los principales delitos que se cometen en las áreas rurales de la Zona Centro.