La inseguridad continúa siendo uno de los principales desafíos de Guayaquil, y en medio de crecientes cuestionamientos ciudadanos y tensiones entre el Gobierno Nacional y el Municipio, el alcalde Aquiles Álvarez decidió romper el silencio. En una intervención durante la sesión del Concejo Cantonal realizada el jueves 12 de junio de 2025, el burgomaestre admitió errores en su gestión en materia de seguridad y se mostró autocrítico sobre algunas de sus decisiones iniciales.

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“Fue un error creerse Superman”, dijo Álvarez, en alusión directa a las expectativas que él mismo generó durante su campaña electoral, donde prometió enfrentar con firmeza la criminalidad que afecta a la ciudad.

El mandatario reconoció que muchas de sus propuestas se hicieron desde el desconocimiento de los límites reales de las competencias municipales, lo que ha generado retrasos e inconvenientes en la implementación del plan prometido. Entre los errores mencionó también decisiones como la remoción de las rejas del Malecón 2000, una medida que, en retrospectiva, calificó como desacertada.

¿Qué falló en el plan de seguridad de Álvarez?

Durante su campaña, Aquiles Álvarez fue enfático al plantear una propuesta ambiciosa que incluía acciones como:

• La duplicación del número de cámaras de videovigilancia en la ciudad
• El despliegue de 300 drones para monitorear las zonas más conflictivas
• La reactivación y expansión de los llamados botones de pánico
• La eliminación del “show político” para priorizar la acción directa y técnica

No obstante, a más de un año de iniciada su administración, estos elementos aún no se han materializado plenamente. La ciudadanía reclama resultados, y el Municipio enfrenta críticas tanto desde sectores sociales como desde autoridades nacionales.

Uno de los principales factores detrás del retraso sería la espera de procesos del Servicio Nacional de Contratación Pública (Sercop). 

Estas supuestas demoras han impactado la percepción pública, generando dudas sobre la capacidad del Municipio para ejecutar un plan de seguridad efectivo.

¿Cómo responde el alcalde a las críticas y a los conflictos políticos?

Además de la autocrítica, Aquiles Álvarez se refirió a los roces mantenidos con el Gobierno Nacional, que han entorpecido la coordinación institucional en materia de seguridad. Sin embargo, evitó confrontaciones directas:

“Si ellos quieren pelear, que sigan peleando. Yo no le voy a dar bola. Seguimos adelante y vamos con fe”, manifestó durante su intervención.

El alcalde enfatizó que su enfoque de trabajo sigue siendo el fortalecimiento del eje social como base para una política de seguridad a largo plazo. Según Álvarez, su administración apuesta por una estrategia de convivencia ciudadana y prevención del delito desde las raíces estructurales del problema.

“Por convicción he aplicado el plan de política criminal y convivencia ciudadana”, aseguró. “Cualquier cosa que me digan no me afecta; me da pena por la ciudadanía”, concluyó.

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