Isidro Palma, un vendedor de ceviches, murió esposado dentro de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de Tonsupa, en Esmeraldas, por un ataque al corazón. Sucedió la tarde del martes, luego de que el hombre, de 63 años, fuera detenido porque supuestamente se había robado el celular de un turista.

Ross Palma, sobrina del adulto mayor, contó que a las 10:00 un par de extranjeros le encargaron un bolso a su tío y se fueron a la playa. El anciano lo habría dejado cerca de su triciclo y se puso a trabajar.

Según su familiar, Isidro vendió algunos platos de ceviche y se movió de su sitio para hacerlo. “Ese momento lo aprovechó otro comerciante, quien se robó las pertenencias”.

Cuando los extranjeros regresaron por su bolso se percataron de que ya no había un celular y denunciaron al ‘cevichero’ como el presunto pillo.

El hijo de Isidro no quería que lo detuvieran porque su padre sufría de hipertensión y diabetes. Pedía ocupar su lugar hasta que todo se aclarara.

Mientras tanto, Ross fue con otros familiares hasta la casa del comerciante que supuestamente se sacó el celular de la maleta, pero no lo encontraron.

Cuando regresaron al retén, Isidro había muerto de un paro cardíaco. Thomas Larosa, yerno del fallecido, mencionó que los policías, al parecer, le agredieron para sacarle información. “Le dio un infarto por la presión”, dijo.

Los familiares pidieron ayuda en la junta parroquial para que les ayudaran con el féretro porque son de escasos recursos. Además, piden colaboración para pagar un abogado e iniciar una investigación del caso.