Un ataque a tiros contra un taxi dejó a dos personas heridas y generó alarma en el sector de San Rafael, en el valle de Los Chillos, cantón Rumiñahui, provincia de Pichincha, la noche del jueves 3 de julio de 2025. La Policía investiga este hecho como una tentativa de asesinato.

Según información oficial, los investigadores habrían recibido una alerta en el ECU 911 que advertía sobre disparos realizados contra un vehículo particular, tipo taxi, en las calles Gaspar Lema y Bárbola Sinaylin. El auto atacado fue identificado como un Chevrolet Aveo Emotion de placas PBY-2253.

Al llegar al lugar, personal de diferentes áreas de la Policía Nacional del Ecuador inspeccionaron la escena con el objetivo de recabar indicios que permitan a esclarecer el caso, pues las dos víctimas habían sido trasladadas de urgencia a casas de salud en Quito. Hasta el cierre de esta nota periodística, se desconocía su estado actual.

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Los peritos realizaron un análisis de la escena del suceso y levantaron varios indicios balísticos y documentales que podrían reforzar la hipótesis de un ataque dirigido. En el sitio se hallaron dos balas calibre 9 milímetros, así como un teléfono celular encendido, marca Redmi, con estuche azul.

El sector donde ocurrió el ataque armado en Rumiñahui

Posible amenaza en lugar de ataque en San Rafael

Uno de los elementos que más llamó la atención de los investigadores habría sido una hoja de papel con un mensaje amenazante escrito con tinta roja, que decía: “Windorcity esto le va pasar a todo lo que quiera medir fuerza tt La K. LA. B”.

El mensaje estaría relacionado con disputas entre posibles grupos delictivos, aunque esta hipótesis aún no ha sido confirmada por las autoridades.

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Hasta el cierre del procedimiento, en este caso no se reportaron personas detenidas. Agentes  especializados de diferentes unidades asumieron el caso como una tentativa de asesinato y lo investigan bajo los lineamientos de este tipo de delitos. 

El sector donde ocurrió el hecho, en una zona residencial de Rumiñahui, fue parcialmente cercado mientras se levantaban las evidencias. La Policía continuaba con la recolección de información para determinar la motivación del ataque, el posible vínculo entre las víctimas y los agresores, y la autenticidad del mensaje dejado en la escena.

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